Los negros nubarrones hacían presagiar anoche lo peor, pero a medida que los peregrinos avanzaban en las cuentas del rosario, el cielo sampedrino se fue despejando hasta iluminar el predio frente a la Gruta de Lourdes, donde una vez más se escenificó El Mensaje de Lourdes.
Casi 30.000 personas participaron el domingo de la fiesta de Lourdes, en San Pedro de Colalao, y unas 60.000 ingresaron a la villa este fin de semana, informó el director de Cultura de la comuna, Gustavo Sánchez.
La misa y la megaescenificación estaban previstas para el sábado pero la lluvia anegó todo el predio y los actos debieron posponerse para ayer, domingo. Había mucha preocupación de los organizadores por los gastos que implican contratar equipos técnicos y movilizar a miles de personas.
Sin embargo, todos los problemas se fueron solucionando y hasta ello posibilitó que muchos más fieles pudieran sumarse, entre ellos, el propio arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez, y su obispo auxiliar, monseñor Roberto Ferrari, quienes concelebraron la misa.
Los obispos encomendaron al pueblo tucumano a la Virgen de Lourdes y pidieron la intercesión de Mama Antula, la primera santa argentina canonizada ayer por el Santo Padre.
“El lema de la fiesta de este año fue ‘Que se construya una capilla’ por eso pusimos especial interés en que aparezca ese eje en los diseños de las escenas”, explicó la legisladora Silvia Elías de Pérez, autora del guión de El Mensaje de Lourdes.
“Si bien ponemos en escena esta obra desde hace 25 años, la renovamos todos los años, cada vez con más y mejor tecnología”, añadió la directora de la obra, Graciela Weiss.
Las sombras chinescas y nuevos efectos especiales hicieron brotar largos aplausos ayer. También se puso una fuente real de donde brotaba agua. La escena final con más de 300 personas en escena y 20 jinetes emocionaron al público.
La escenificación concluyó con una larga procesión de antorchas que se extendió desde el predio hasta la parroquia de la villa.
