SANTA FE.- Inesperado sacudón en el cordón industrial del Gran Rosario. La multinacional Dow Argentina, surgida en Estados Unidos y que arribó al país en 1957, anunció que el año próximo cerrará su planta de San Lorenzo, en el Gran Rosario, la única en Argentina que produce poliuretano, material fundamental para industrias como la de la línea blanca, la automotriz y para la producción de colchones.
“Esta es una decisión en el marco de una reestructuración global de la compañía. En julio del año pasado se anunció el cierre de activos y plantas en Estados Unidos, China, Australia y, ahora, la Argentina”, explicó a LA NACION el vocero de la firma, Matías Maciel Arba. “Lo que debe quedar claro es que la medida no tiene ninguna relación con la coyuntura económica o sanitaria del país. Se resolvió oportunamente”, agregó.
“Si bien entendemos que es una decisión difícil, continuaremos dándoles apoyo para garantizar que la seguridad y el respeto por la gente se mantengan en el centro de nuestra cultura”, señaló en tanto el comunicado difundido por este lunes por la empresa.
Desde el gobierno santafecino se admitió preocupación por el anuncio. “Es lógico, Dow no es una empresa más sino una de las compañías más importante del mundo. Ya anunció el cierre de sus plantas en California, Australia y China, y ahora la de nuestra provincia. Mañana vamos a mantener una reunión para ver cómo sigue todo eso. Debo admitir que es difícil quebrar una decisión de esta naturaleza cuando ya la empresa la adoptó y la comunicó”, sostuvo en diálogo con LA NACION el ministro de la Producción de Santa Fe, Daniel Costamagna.
Por su parte, el Sindicato de Obreros y Empleados Petroquimicos Unidos (Soepu) anunció esta tarde la paralización de la planta y desde este martes habrá protestas en las puertas de entrada de las instalaciones para visibilizar conflicto.
Lo concreto, según fuentes gremiales, es que el cierre se hará en mayo de 2022. Afectará a los 101 trabajadores que actualmente cumplen tareas en esa planta
La firma también refirió al “impacto que esto tendrá en los empleados de la zona y sus familias”, y se comprometió, según el mismo mensaje, a “manejar esta situación de manera respetuosa, justa, equitativa y sujeta a derecho a todo el equipo de Dow, a contratistas y a proveedores relacionados con la operación”.
“Es una noticia triste, muy mala para la provincia y para el país, si queremos un país industrializado”, admitió el secretario del Soepu, Mauricio Brizuela, quien adelantó que esperan una respuesta de parte del arco político ante el conflicto que provoca el cierre “porque están en juego 101 puestos de trabajo, es decir, 101 familias”. En este sentido, indicó que además de la pérdida de la producción y las fuentes de trabajo, la decisión de Dow también implica un retroceso en torno al ingreso de divisas al país.
En abril de 2010, Down inauguró nuevas instalaciones de última generación en su planta fabril de Puerto San Martín, también en el Gran Rosario, completando una inversión de 12 millones de dólares, que se sumaron a los otros 15 millones de dólares que ya había volcado en la planta de semillas que posee en Venado Tuerto.
