La masa salarial se lleva la porción más grande del gasto corriente de la Provincia. De los $ 120.000 millones del presupuesto de Tucumán, la mayoría está destinado para cubrir los sueldos de los más de 100.000 empleados públicos de áreas como administración pública, salud, educación, seguridad, Justicia y Legislatura, entre otras. La implementación de la “cláusula gatillo” para tratar de equiparar los salarios respecto a la inflación hace que los fondos para otras partidas, como obra pública, se vean más ajustados.
El director del Centro de Estudios Económicos y Sociales del NOA (Cesnoa), Daniel Abad, estimó que el gasto salarial ronda el 65 %, pero por la revisión por la inflación que acordaron los gremios en marzo incrementarán ese porcentaje. Sin embargo, desestimó que vaya haber complicaciones para el cumplimiento de obligaciones. “Hasta ahora se están honrando todos los compromisos; de acuerdo a lo que informó el ministro de Economía (Eduardo Garvich), no habría problemas hasta fin de abonar todos los compromisos salariales que tiene la Provincia, incluida la ‘cláusula gatillo’. Eso es como consecuencia de que hubo una ampliación presupuestaria el mes pasado (unos $ 20.000 millones). En principio está garantizado, pero en la Argentina puede pasar cualquier cosa, pero hasta hoy está todo garantizado”, reflexionó en diálogo con LA GACETA.
Respecto a la obra pública, Abad señaló que no hay conocimiento de que se haya tomado la decisión de pararla. “Se siguen haciendo o reparando cosas, de acuerdo a la información pública. Pero esto es día a día, si mañana llega a haber una devaluación como la de agosto hay que hacer los números de nuevo”, explicó.
$120.000 millones es el presupuesto que tiene la Provincia hasta fin de año
El economista Eduardo Robinson, en cambio, criticó que los números de la Provincia no sean transparentes. “Si bien hay datos de la Contaduría General de la Provincia, los datos respecto a la ejecución presupuestaria todavía quedan muchas dudas”, lanzó. Sin embargo, estimó que el 90 % del gasto corriente tiene que ver con la masa salarial. Por este sentido, cuestionó los fondos que puedan quedar para obra pública. “Queda muy poco. De hecho, la infraestructura más relevante en la Provincia (en la gestión de Juan Manzur) es la obra de la pista del aeropuerto, y se hizo con fondos nacionales; prácticamente no se conocen obras de envergadura con fondos propios. En estos últimos cuatro años fueron los trabajos en el aeropuerto, que se hicieron con programas nacionales”, manifestó el especialista a este diario.
En los cuatro años del Gobierno de Manzur, en tres se otorgó la “cláusula gatillo” a los trabajadores estatales. En cuanto a obras, el Ejecutivo destinó $ 29 millones para la construcción del Centro de Atención Primaria en Adicciones (Cepla) en La Costanera, inaugurado en junio; en enero anunció la inversión de $ 140 millones para iniciar la construcción 200 viviendas; y ya desembolsó unos $ 90 millones para diseñar el Centro Cívico, cuyo costo final será de alrededor de $ 160 millones.
Cuentas ordenadas
En marzo, el Gobierno cerró con distintos gremios un incremento salarial del 25 %, en dos partes, más tres revisiones por inflación: junio, septiembre y diciembre. En abril se otorgó una suba del 12,5 % y con la actualización de junio por inflación se incrementó un 11 %, lo que totaliza un 23,5 %. El julio, el índice fue de 2,2 %, el más bajo del año, mientras que en agosto saltó al 4 %, principalmente por la fuerte devaluación del peso. Se estima que en septiembre el coeficiente estará por encima del 5 % y que el año podría terminar con una inflación del 60 %, lo que se traduciría en recomposición salarial.
23,5% es el incremento salarial que ha otorgado el Gobierno hasta la revisión de junio
Tanto Abad como Robinson destacaron que Tucumán ha llevado sus cuentas de manera ordenada año a año, por lo que estaría en condiciones de afrontar los compromisos salariales y el segundo medio aguinaldo sin dificultades. El primer especialista dijo que “no hay rodjo a la vista, y consideró clave no haber tomado deuda en dólares, como lo hicieron provincias como Córdoba, Buenos Aires o Santa Fe. El segundo, en tanto, opinó que dado la tasa impositiva de Ingresos Brutos acompaña la inflación eso le permite a la Provincia llevar la “cláusula gatillo” sin problemas. “Hoy por hoy, no hay una situación de asfixia financiera”, señaló.
Días atrás, referentes gremiales expresaron que confían con que la Provincia cumplirá con sus obligaciones sin tener que emitir cuasimoneda, algo que planean hacer algunos gobernadores. Sin embargo, criticaron que haya personal de la repartición pública que esté cobrando después del 10 de cada mes, por lo que se ven forzados a saldar sus deudas con intereses altísimos.
65% del gasto corriente está destinado para la masa salarial
El ministro de Gobierno y de Justicia, Regino Amado, opinó que quizá haya sectores que se dejaron contagiar por el temor de lo que ocurre en otras provincias, como Chubut, donde están abonando salarios de manera fraccionada. “Creo que ese temor hace que tengan la incertidumbre. El ministro de Economía ha sido claro en que vamos a poder pagar los compromisos que hemos adquirido”, aseguró también legislador electo.
La inflación, el techo
El funcionario provincial recordó que ya había aclarado que, siempre y cuando la inflación no sea exorbitante, van a cumplir con la actualización salarial acordada. Respecto a los pagos tardíos, manifestó: “tienen razón, porque los vencimientos son el 10 de cada mes en la mayoría de los casos. Lo estamos viendo, pero pasa que dependemos del goteo (de fondos coparticipables) de Nación y de la recaudación de la Provincia, que también ha sufrido el impacto por la recesión. Eso nos hace a veces reprogramar los pagos, pero la idea es hacerlo en el tiempo que corresponde”, indicó.
$ 540 millones calcula la Provincia que le costará la revisión por inflación de septiembre
Respecto a los pagos de las actas compromisos, aclaró que la suba salarial que estaba prevista para septiembre (del 12,5 %) fue absorbida por la cláusula de revisión, por lo que a mediados de octubre se pagará -por planilla salarial- el equivalente a la inflación acumulada. Se estima que será cerca del 12 %.
“Siempre hemos dicho que el 25 % (de incremento) es el piso y que el techo lo da la inflación. Si tendríamos que pagar ese 12,5% aparte, el año pasado hubiésemos tenido que pagar el 48 % más un 12,5 %. Hemos dado lo que da la inflación, y así se liquida”, aclaró.
