“Hago saber mi renuncia al cargo de defensor particular del menor, teniendo en cuenta la actual situación de incertidumbre, por la cual dejo en libertad a sus progenitores para decidir el nombramiento de un nuevo profesional o un defensor oficial que continúe la labor en la defensa”, fue el escueto mensaje de Pereyra.
El ataque ocurrió el 19 de noviembre pasado en el garaje de Moreno al 800, en la Ciudad de Buenos Aires. Carlos Manuel le recriminó al playero Arturo López (63) que su BMW, supuestamente, estaba rayado. En el video de la cámara de seguridad del lugar se ve cómo el adolescente, acompañado por su madre y sus hermanos, le reclamó al playero por el daño a su coche.
Después de acercarse a la cabina de cobro del estacionamiento, Carlos Manuel A. le dio un fuerte golpe en la mandíbula a López: eso bastó para dejarlo inconsciente y sin reflejos para defenderse. Cuando cayó, golpeó su cabeza contra el piso.
Como resultado el playero quedó con un coágulo en el cráneo y recién el domingo pasado abrió los ojos y los médicos confirmaron que se encuentra estable, aunque su vida aún corre peligro.