“Al Hogar Feliz” desde Tucumán fue un ícono en el supermercadismo nacional. Abrió sus puertas en 1953 en San Martín 344 y se cerró a fines de los años ’80.
“Fue el segundo supermercado que se instaló en el interior del país, y el más grande de todos durante muchos años”, señala Leonardo Leiro, integrante de la familia dueña del emprendimiento.
Otra famosa sucursal de “Al Hogar Feliz” se ubicaba en avenida Mate de Luna al 2700, junto a la lechería Cootam.
“Un grupo de empresarios soñadores y adelantados para la época lo lograron. Un gran orgullo para los tucumanos. Alli hicieron escuela de supermercados en Salta, en Mendoza y en otras provincias”, señala Leiro en una publicación en el Facebook Fotos Antiguas de Tucumán.
Las imágenes compartidas por Leiro corresponden a un año indeterminado a principios de la década de los ’70.
La enorme afluencia de público se debe a las fiestas de fin de año. En las vidrieras, se pueden ver los letreros “Navidad” y “Año Nuevo”.
En este moderno supermercado se podía comprar “de todo”, según recuerdan sus clientes.
Además, contaba con un bar en su interior, donde se servían recordados sándwiches con licuados, según recuerdan los comentaristas.
Ubicado estratégicamente junto al Banco Provincia, y a metros de la Plaza Independencia, también disponía junto a su entrada de una heladería al paso que expendía sus productos a los transeúntes.
A su alrededor había locales muy conocidos bares y restaurantes como Costa Azul, también una casa donde se lustraban zapatos, y la juguetería Finkito.
Marcelo Rosatto, en el mismo Facebook, aportó una foto del letrero luminoso realizado por la empresa Vidriolux, propiedad de su padre, Eros Ariel Rosatto.