Las compañías aéreas cancelaron entre ayer y hoy cerca de 4500 vuelos en el mundo y miles de itinerarios sufrieron retrasos debido a la falta de personal ante la expansión de la variante ómicron de Covid-19, según datos del portal Flightaware.
El sitio especializado en tráfico aéreo reveló que unos 2300 vuelos fueron suspendidos en Nochebuena, un día siempre de mucho movimiento ante la cantidad de personas que quieren pasar las fiestas con sus familias, y unos 2200 con fecha para hoy y mañana tuvieron que ser reprogramados.
La causa de la anulación corresponde a la nueva ola de coronavirus provocada por ómicron, considerada más contagiosa y que afecta la cantidad de personal disponible tanto de tripulación como en los aeropuertos, informaron las líneas aéreas.
De acuerdo a FlightAware, unos 700 vuelos afectados tenían como origen o destino a Estados Unidos, el país más golpeado por la pandemia y que hoy superó los 52 millones de contagios totales, con más de 816.000 fallecidos.
La variante ómicron ya pasó a ser la dominante en Estados Unidos, con una media de más de 188.000 positivos diarios en la última semana y una curva epidemiológica en ascenso, de acuerdo con lo publicado por la agencia Télam.
“El pico de casos en todo el país esta semana ha tenido un impacto directo en nuestras tripulaciones y las personas que dirigen nuestras operaciones”, dijo la compañía United Airlines, que tuvo que cancelar ayer más de 200 viajes.
Delta Air Lines por su parte también canceló 260 vuelos, según Flightaware, tanto por el coronavirus como, en menor grado, por condiciones climáticas adversas. “Los equipos de Delta han agotado todas las opciones y recursos” antes de decidir estas cancelaciones, argumentó la aerolínea en un comunicado.
Estas anulaciones frustraron los planes de muchas personas de pasar las fiestas con sus familias o de volver a viajar en las vacaciones de final de año, después de que la Navidad de 2020 fuera golpeada de lleno por la pandemia. Y la situación se repitió también en Reino Unido, Australia y en China, donde la compañía China Eastern anuló 480 vuelos, cerca del 20% de los itinerarios previstos, y Air China dejó en tierra un 15% del total de aviones que debían volar.