A fines de noviembre, en un intento por frenar el creciente drenaje de reservas, el Banco Central (BCRA) decidió prohibir la compra en cuotas de viajes al exterior y alojamientos fuera del país.
La medida cayó como un baldazo de agua fría en el sector turístico, en la previa de la temporada de verano.
Una consecuencia evidente de la medida fue el freno a los consumos en dólares. Así lo muestran los datos oficiales del BCRA. El 25 de noviembre, un día antes de la normativa, el stock de préstamos en dólares con tarjetas de crédito ascendía a US$177 millones.
Las compras de último momento, que se dispararon en las horas que pasaron entre el momento en que salió la normativa y su puesta en marcha, llevaron ese saldo a un pico de US$193 millones el 30 de noviembre. A partir de allí, la tendencia descendente se instaló y el stock tocó un mínimo de US$105 millones a mediados de diciembre.
En la segunda quincena se registró una leve recuperación explicada por el inicio de las vacaciones, pero de punta a punta de diciembre los consumos con plásticos en dólares se derrumbaron un 24,3%. El último día hábil del año, el saldo era de US$146 millones.
“Se aprecia la influencia que ha tenido la disposición que prohibió el uso de cuotas para servicios turísticos en dólares, además el recrudecimiento de los contagios puso un freno inesperado a los viajes entre países y en consecuencia bajan las operaciones en moneda extranjera con tarjetas de crédito”, sostuvo Guillermo Barbero, socio de First Capital Group.
Más viajes, más gastos en dólares
Al analizar los datos anuales, en cambio, se observa un crecimiento de los préstamos en dólares con tarjeta de crédito. Según datos del BCRA, el stock aumentó 47,4% a lo largo de 2021 y fue la única línea crediticia en moneda extranjera que presentó números positivos. La mejora se explica por la progresiva reapertura del turismo internacional, tras un 2020 marcado por las restricciones.
Por el contrario, los préstamos comerciales en moneda extranjera mediante documentos retrocedieron 23,3% y el resto de las líneas cayeron 25,3% el año pasado. En consecuencia, el stock de financiamiento en dólares al sector privado finalizó 2021 con una baja de 22,7%.
También cayeron los consumos en pesos
Aunque diciembre se caracteriza por las compras de fin de año, los gastos con tarjeta de crédito en pesos también mostraron una contracción en términos reales. Es que si bien los consumos nominales aumentaron un 6,4%, al descontarle el efecto estacional, el BCRA calculó una baja mensual de 0,8%.
A nivel interanual, la historia se repite. En 2021, el saldo de préstamos en pesos con tarjeta se incrementó 41,4% en términos nominales, pero anotaron una caída de 8,4% al ajustar por estacionalidad.