Luego de que el pasado martes Tucumán Despierta diera cuenta sobre la segunda parte del engaño del intendente para con los trabajadores del Mercado del Norte, el Municipio movilizó a toda la prensa de la provincia con el fin de intentar instalar en la opinión pública la idea de que se están ocupando del establecimiento. Sin embargo, la falsedad volvió a quedar al descubierto una vez más.
No es casualidad. Pasó exactamente una semana desde que anunciáramos desde este medio la difusión de imágenes que el mismo alfarismo se encargó de viralizar entre la prensa como un intento de justificar el desalojo de los cientos de puesteros que trabajaban en el Mercado del Norte. Rápidamente intentaron montar una escena sobre el establecimiento por medio de la quita de peso a las columnas del edificio.
Ahora bien, cabe recordar que, al mismo tiempo, esta movida de parte del Municipio respondía al hecho de que una semana antes de esta puesta en escena de parte del alfarismo, desde Tucumán Despierta se trajo de vuelta al presente las peripecias económicas y psicológicas que sufren todavía los ex puesteros del Mercado del Norte cuando se cumplió el primer año de su cierre.
El hecho de que, además, se señalara desde este medio que Claudio Viña no tuvo más remedio que admitir que el local de plazoleta Dorrego no cuenta con las características del Mercado del Norte, terminó por poner al alfarismo “patas para arriba”. Al respecto, el ex bussista y ahora alfarista, el secretario de Ingresos Municipales, admitió que “el mercado de la plazoleta Dorrego obviamente no tiene las características que tenía el Mercado del Norte”.
Pero lo tragicómico vino de la mano de las mismas declaraciones de este funcionario municipal que apenas hace un par de semanas, había manifestado que en lo que respecta a los rumores de un posible proyecto para la reconstrucción del mercado y su licitación, ratificó que no había planes a corto plazo y que lo que están haciendo son obras para salvaguardar la estructura del Mercado del Norte.
Es decir, reconocía que mintieron de forma descarada cuando aseguraron que se harían cargo de reparar el tradicional edificio ubicado sobre la peatonal Mendoza. Esto fue lo que puso en jaque a la ineficiente gestión de Germán Alfaro. Al punto de que apenas 48 horas después de que Tucumán Despierta expusiera las expresiones de Viña, el funcionario extrañamente se encuentra todavía fuera de la provincia.
¿Acaso se trata de un “castigo” de parte del oficialismo capitalino luego de que trascendieran sus declaraciones? A causa de que quedó en evidencia la estafa de parte del municipio capitalino, cuando admitía que no se haría nada con el Mercado del Norte, ayer y de forma “mágica”, el secretario de Obras Públicas del municipio, Alfredo Toscano, salió a borrar con el codo lo afirmado por su colega apenas hace dos semanas.
En ese sentido, ahora dijo que la Municipalidad de San Miguel de Tucumán avanza con las obras para evitar el colapso del Mercado del Norte. Incluso, hasta se animó a asegurar que este trabajo estaría listo el mes que viene o en abril a más tardar. Cuando Claudio viña había dicho que se necesitaría una suma millonaria para recuperar el Mercado del Norte. Pero ahora Toscano afirma que las obras estarían terminadas para abril a más tardar.
Tal parece que el dinero de repente crece en los árboles o por arte de magia el dinero apareció como para poder llevar adelante en cuestión de semanas las reparaciones necesarias. “En marzo-abril vamos a salir de la zona de colapso”, dijo Toscano. Pero, ¿No era que el derrumbe era inevitable y que no era posible solucionar ese problema? Pues parece que por un “milagro” sí era posible al final hacer algo por el Mercado del Norte.
Ahora bien, ¿Cuál fue la excusa que brindó Toscano ara justificar esta intempestiva movida alfarista? Que ni las supuestas 3.000 toneladas de escombros que sacaron del Mercado del Norte, para descomprimir el peso de paredes, columnas, pisos y cielorrasos, hizo desaparecer la inquietud de que se repita algún episodio como el descalzamiento de dos pilares en marzo pasado.
“Es que hemos visto los hundimientos y además nos asustó el temblor. En marzo-abril vamos a salir de la zona de colapso”, describió Alfredo Toscano. No es cierto. Lo que los asustó fue el peso de la opinión pública que por medio de las revelaciones realizadas desde este medio se dio cuenta acerca de la verdadera estafa a la que Germán Alfaro sometió durante más de un año a quienes desempeñaban a diario su trabajo en el lugar.
“Va a haber una demolición parcial: esas columnas explotadas deben ser reemplazadas”, dijo. Pero hace un año aseguraron que no era posible realizar algún tipo de arreglo parcial, tal y como lo solicitaban los puesteros. Incluso, dijeron desde el Municipio que era necesario sí o sí hacer todo desde cero. Pero “mágicamente”, al parecer, ahora cambiaron de opinión y sí es posible hacer un arreglo parcial.
Pocos recuerdan que, incluso, hasta hubo en su momento una audiencia en la Justicia para que la Municipalidad diese explicaciones de lo sucedido y plantease acciones, y también se debió ordenar el desalojo de los puesteros. Desde entonces, el mercado quedó cerrado. Y el alfarismo jamás dio explicaciones a la Justicia, algo a lo que ya tiene acostumbrada a toda la sociedad tucumana.
La Municipalidad contrató a una empresa, Línea Construcciones, para hacerse cargo de las tareas de apuntalamiento, aligeramiento de peso y sacado de escombros. Estará hasta septiembre de este año. Se pusieron unas 600 columnas metálicas y se comenzó a estudiar el suelo. Se demolieron paredes y se achicaron cielorrasos y pisos. De allí salieron los 300 camiones de batea con escombros. Se calcula que cada uno llevó entre 10.000 y 15.000 kilos.
“Hemos visto los hundimientos y nos asustó. Apareció en muchos sectores de la ciudad”, dijo el secretario Alfredo Toscano. “Además de que nuestros edificios históricos no tienen mantenimiento, hay riesgo si no cambiamos el sistema de agua y cloacas, que tiene 50 años, sobre todo el de cloacas, que tiene caños en vítrico”, describió. Si lo sabían, ¿Por qué nunca hicieron nada al respecto?
“Recién ahora estamos en condiciones de comenzar a hacer obras”, dijo el muy hipócrita de Toscano. Después vendrá la reconstrucción o la definición del destino del edificio. “Eso va a definir el intendente”, concluyó el funcionario. En abril se podría definir qué se hará con el Mercado del Norte, pero lo que corresponde es devolverles su lugar de trabajo a los puesteros. ¿Acaso trama algún fin espurio Germán Alfaro a la hora de la vuelta al funcionamiento del lugar?