Ayer y durante varias horas, personal de Gendarmería Nacional allanó varias oficinas, como consecuencia de los requerimientos realizados por los fiscales intervinientes y la acumulación de una serie de elementos de prueba.
Los gendarmes ingresaron a las dependencias situadas en un edificio de avenida Solano Vera, en Yerba Buena.
En el lugar secuestraron una computadora, una notebook, varios teléfonos celulares, un pendrive y una importante cantidad de documentos que estarían vinculados a la causa.
De acuerdo con la información a la que pudo acceder este diario, los efectivos hallaron cerradas las puertas de las dependencias, pero tras una serie de gestiones lograron ingresar sin causar daños en las aberturas.
La causa cuenta con múltiples denuncias de acreedores en contra de Bacchiani y sus colaboradores por supuestas estafas, lavado de activos con monedas extranjeras sin autorización e intermediación, entre otras, en Tucumán, Córdoba y Catamarca.
La investigación de Tucumán, que en un primer momento estuvo a cargo de a Justicia Federal tucumana, quedó en manos del juez Contreras, quien ayer avanzó en una decena de imputaciones.
Se pudo conocer que entre los acusados habría cuatro personas oriundas de Tucumán, que estarían vinculadas con las actividades de la sucursal de Yerba Buena, en la que se recibía dinero con la promesa de ganancias mensuales de entre 14 y 23%.
