“Me explicaron ahí en Siprosa que haga la denuncia para que inicie el expediente, me dijeron al día siguiente que me iban a estar hablando cuánto antes avance todo para investigar. Mi abogado me dijo que haga la denuncia en Concepción porque el delito estaba sucediendo ahí”, detalló.
Como es de esperarse, los tiempos de la justicia no fueron aptos para la paciencia de Sergio, quien quería descubrir a la persona que usurpaba su identidad: “Por mi parte empecé a averiguar si este sujeto seguía con mi sello porque la foto era de septiembre de 2019. Di con el teléfono de la clínica, así mi hermana se hizo pasar por paciente y pidió turno con el doctor Sergio Martínez. Ese 18 de abril fuimos los dos, yo esperaba al frente, ella entró con mi sobrina que filmaba todo. La secretaria le dijo que ya la atendían, pero de un momento a otro el supuesto Sergio sale a hablar con la secretaria y le dice que no iba a poder atender, yo creo que la reconoció. Cuando mi hermana me dijo que parece que se había dado cuenta de todo yo me decidí entrar y lo encaré”, nos revela Martínez.
“Yo estaba con chaqueta, entré y le dije a la chica ‘yo soy el verdadero doctor Sergio Martínez, decíle al que está usando mi sello que venga y me explique qué está pasando acá o comunicame con el dueño de la clínica’. En eso sale un tipo de un consultorio y me dice ‘venga doctor yo le voy a explicar lo que está pasando’”, se acuerda el profesional de la salud, recordando ese momento cargado en adrenalina y enojo.
“Yo entré y le dije que quién era y me dice ‘yo soy el que está usando tu matrícula’, yo le dije que lo iba a hacer meter preso, y me dice que por favor no haga nada porque era su trabajo… ¡semejante desfachatez! Yo le dije ‘si querés ser médico andá a estudiar y recién ejercé la medicina, no en mi nombre’. Yo salí y volví a ir a la comisaría y fui a avisar que estaba ahí esa persona que hacía uso ilegal de la medicina que por favor allanen, me dijeron que para eso necesitaban orden de la fiscalía algo que nunca llegó”, nos comenta.
“Seguí averiguando y descubrí su nombre, me informaron que era un estudiante de la carrera de medicina que nunca se recibió, y así ejerce a mi nombre, me puedo comer juicios por mala praxis, muertes, gravísimo. Llamé el lunes al Siprosa y me pidieron número de expediente, me dijeron que recién el 25 de abril ingresó mi pedido para evaluación”. A pesar de que los tiempos lentos de la justicia son moneda corriente, el doctor Martínez explica el por qué necesita que se actúe cuanto antes: “Cada día que pasa más pruebas se borran, por eso publiqué eso en Facebook, tengo bronca e indignación por la impunidad. A raíz de la publicación comprobé que la esposa de este señor trabaja en una repartición del Siprosa como abogada” confesó, contando en algo que podría derivar en una denuncia más grave en caso de comprobarse.
“Otra doctora colega se contactó y me dijo que le pasó lo mismo y que también en una clínica del Sur, que denunció hace tres meses y que todavía no habían hecho nada. Lo concreto es que del Siprosa no se están moviendo para solucionarlo. Yo denuncié a la clínica civilmente y al falso doctor por ejercicio ilegal de la medicina, suplantación de identidad y usurpación de título”, nos explica. “Casualmente hace un mes que habían detectado en Concepción que había un traumatólogo trucho, se ve que es moneda correcta. Me contaron que este falso médico también trabajó en otro sanatorio de acá de Tucumán. Es un estudiante de medicina que ejerce como médico, imaginensé la gravedad de que atienda gente”, cerró el doctor.