María solicita de manera imperiosa reunirse con el Gobernador, Osvaldo Jaldo, para poder contar con la ayuda del Gobierno para que su hijo pueda entrar a rehabilitación ya que se encuentra con un serio problema de adicciones desde hace más de 4 años.
“Lo único que quiero es hablar con el Gobernador para poder internar a mi hijo” explicó María, quien informó que su hijo consume drogas desde los 16 años, por lo que solicita de la colaboración de la comunidad para poder lograr que ingrese a rehabilitación. María añadió que su hijo está atravesando un momento difícil, llegando al punto de tener la intención de vender sus elementos de valor para poder obtener dinero con el cual adquiriría más drogas para continuar consumiendo: “Quiero salvar mi vida y la de terceros, me apena mucho esta situación, pero él está en su mundo”.
María es oriunda de la Banda del Río Salí y aseguró que el Intendente de esta localidad, Darío Monteros, no quiso atenderla cuando se presentó ante él para comentarle la situación y poder llegar a una solución: “Si a mi hijo le pasa algo, va a ser responsable Darío Monteros”. A su vez, aseveró que el jueves por la noche les habían indicado a ella y a su suegra, Blanca, que concurrieran a Casa de Gobierno este viernes por la mañana para ser recibidas por Jaldo o por algún otro funcionario, algo que finalmente no ocurrió.
Blanca confirmó que su nieto tiene amenaza de muerte, por lo que señaló que la ayuda para este joven de 21 años tiene que darse de manera urgente, antes que suceda una tragedia. “Así como en las elecciones salen a buscar votos, nosotros venimos a buscar una solución” fue el mensaje que dejó Blanca para el Gobernador, Osvaldo Jaldo. Blanca sostuvo que, al ser mayor de edad, su nieto debe estar de acuerdo para poder ingresar a la rehabilitación o de lo contrario, acceder a una internación involuntaria con la ayuda de un abogado que lo acredite, algo que está fuera de sus alcances económicos y que demoraría varios años. “Se ponen el cartel de “luchamos contra las adicciones “ y es mentira, no hacen nada por los barrios, la situación sigue igual que siempre”, finalizó su testimonio Blanca.
Por su parte, María denunció que constantemente su hijo recibe amenazas de muerte e incluso ella misma fue agredida a raíz de esta situación. “Solo pido que el Gobernador me escuche para poder blanquear la situación y que él me dé una solución” finalizó.