Es una obra imponente, que va tomando forma a pasos acelerados. El Estadio Único de Santiago del Estero, que será estrenado en junio de 2020 como una de las sedes de la Copa América, se perfila para ser el más moderno de la Argentina.
Capacidad para 28.000 espectadores sentados, todas las tribunas techadas, palcos VIP, museo del deporte, restaurante, estacionamiento techado para 700 autos, toda la iluminación led y tecnología de última generación en cada uno de los rincones, son algunos de los componentes que lo harán “único” en el país.
“El estadio es una obra de gran envergadura. Será el de más alta tecnología de la Argentina. No hay otro con estas característica en el país. Cumple con todas las normas que exigen la FIFA y la Conmebol”, contó Alejandro D’Angelo, gerente de Proyecto y Construcción del estadio.
La gran obra se encuentra a la vera del río Dulce, entre el Jardín Botánico y el Puente Carretero. Más de 300 personas trabajan diariamente para cumplir con los términos establecidos, por eso no sorprende el gran despliegue de maquinarias. “Ya está prácticamente terminada toda la obra de hormigón. Faltan solamente detalles de terminación. También finalizamos con el 100% de la estructura metálica de lo que será la cobertura. Actualmente se están complementando los ajustes de las pasarelas técnicas. El estadio tiene una particularidad: los cierres laterales forman parte de la cubierta. Es como si fuese una mandarina”, reveló D’Angelo.
En un video que la AFA presentó en París ante la Conmebol y la FIFA como posible sede de la Copa del Mundo 2030, también es mencionado el estadio ubicado en la “Madre de Ciudades”. “Bienvenidos al estadio más moderno que estamos construyendo. Bienvenidos al pintoresco Estadio Único, que con capacidad para 28.000 personas y creado bajo estándares internacionales que nos alientan, no sólo queremos jugar la Copa América, sino también el Mundial”, señalaron desde la Asociación del Fútbol Argentino.
Uno de los trabajos que se están realizando en la actualidad es la construcción del campo de juego. La cancha llevará pasto Bermuda TifGrand. “La semilla es norteamericana, pero hay un vivero certificado en la Argentina que nos proveerá. Tenemos que sembrarla en noviembre. Será un estadio tecnológicamente muy parecido a los mejores de Europa. Contará con sistema de luces que emiten una frecuencia para el crecimiento del césped. Como el campo tendrá mucha sombra, será necesario darle una luz artificial al césped. Además habrá sensores de humedad para el mantenimiento del campo de juego”, explicó D’Angelo.
Los trabajos se llevan a cabo en forma paralela en distintos sectores. “Se están realizando instalaciones sanitarias y eléctricas, además de trabajos de mamposterías. Las obras se iniciaron hacer varios meses. En la primera etapa hicimos una fundación profunda; fueron 21,5 metros con pilotajes con lodo bentonítico, una labor bastante compleja por la ubicación del estadio, que se encuentra a la vera del río. Hicimos un gran movimiento de suelo, lo que nos permitió avanzar con la construcción”, reveló el arquitecto.
El 4 de noviembre comenzarán a montar la membrana de la cobertura, que es el techo y el lateral del estadio. “Al proyecto original, se le agregaron más cosas. En un principio no iba a ser techado y luego se decidió que sí. La estructura metálica pesa 3.100 toneladas. Solamente el techo tiene 48 pórticos y cada uno pesa 12 toneladas. Vendrá un equipo de mexicanos, chilenos y peruanos a colocarla. Es un trabajo de mucha complejidad, que se realiza en altura”, dijo D’Angelo.
Aún no se definió desde dónde llegará toda la iluminación, ya que se están analizando tres opciones: Estados Unidos, Holanda o China. “El estadio cumplirá con normativa hasta 2023 en el tema de iluminación, algo que no ocurre con ningún otro estadio de la Argentina. Todo lo que se hace es auditado por la Conmebol y está bajo reglamentación. He trabajado en miles de obras muy grandes, pero es la primera vez que hago un estadio de fútbol. Mi especialización es hacer obras de alta complejidad y de grandes envergaduras”, expresó el especialista. “Sería importante que la gran mayoría de las provincias puedan contar con un estadio de este tipo, ya que genera una gran atracción. A Santiago le dará la posibilidad de atraer público de toda la región y generará una gran atracción turística. Hay que tener en cuenta que el Estadio Único podrá ser utilizado para distintos espectáculos deportivos y artístico”, agregó.
En total habrá 22 palcos VIP, cada uno con baño privado y “office”; cuatro ascensores en las plateas y dos en las tribunas populares; una playa de estacionamiento techada y dos descubiertas; cabinas de prensa de última generación; un centro de procesamiento de datos para administrar los centros de monitoreos de cámaras de vigilancia, audio y sistemas; y una subestación eléctrica con cinco líneas de distintas distribuidoras para garantizar el suministro eléctrico.
“La cantidad de personal varia de acuerdo a la etapa en la que nos encontramos. No hay dudas de que esta obra le está dando oportunidad de trabajo a muchísima gente y seguirá generando trabajo cuando este finalizada. Contamos con una planta propia de hormigón desde el primer día que iniciamos el emprendimiento. Los vidrios templados y los cerramientos de los palcos, lo está cotizando una empresa de Tucumán. Es una obra muy grande y de la cuál nos sentimos orgullosos”, precisó D’Angelo.
El estadio de Santiago va tomando forma y el sueño está cada vez más cerca de hacerse realidad.