Gracias al imprescindible aporte de los senadores fue fuerzas provinciales Alberto Weretilneck (Juntos Somos Río Negro), Magdalena Solari Quintana (Frente Renovador de Misiones) y Clara Vega (Hay Futuro-La Rioja), el kirchnerismo alcanzó el quorum estricto de 37 legisladores presentes y logró habilitar la sesión del Senado en la que el oficialismo pretende convalidar el nombramiento del kirchnerista Martín Doñate en el Consejo de la Magistratura como representante por la tercera minoría de la Cámara alta, desafiando el fallo de la Corte Suprema que la semana pasada había invalidado una jugada similar impulsada por Cristina Kirchner.
Tal como anticipó LA NACION, los legisladores de Juntos por el Cambio decidieron darle la espalda a la sesión y no bajarán en toda la sesión, posición que explicarán en una conferencia de prensa, a las 15. Así, el principal conglomerado opositor tampoco participará del debate del presupuesto 2023 y de la prórroga de varios impuestos, que también contempla el temario de la reunión.
Ni bien arrancó la sesión y tras la entonación del himno nacional, el Senado ingresó en el debate de la designación de los representantes del cuerpo para el Consejo de la Magistratura por el mandato que empieza la semana próxima y que se extenderá hasta el 2026.
Debido a que Cristina Kirchner se encuentra a cargo del Poder Ejecutivo por la ausencia de Alberto Fernández en el país, el decreto que se someterá a aprobación de la Cámara alta fue firmado el martes por la presidenta provisional, la oficialista Claudia Ledesma (Santiago del Estero).
El documento designa a los senadores oficialistas María Pilatti (Chaco) y Mariano Recalde (Capital), como representantes del bloque Nacional y Popular, y a Doñate por la bancada de Unidad Ciudadana. El cuarto representante es el radical Eduardo Vischi (Corrientes) que, de acuerdo a la lectura de Cristina Kirchner, ocupará el lugar correspondiente a la segunda minoría.
De esta manera, quedó excluido el cordobés Luis Juez, que fue propuesto por el bloque Pro para ocupar el sitial correspondiente a la tercera minoría. Al insistir con Doñate, se vuelve a repetir el escenario polémico de abril último, cuando la vicepresidenta ordenó partir en dos el bloque del Frente de Todos para quedarse con tres de los cuatro escaños, y que terminó judicializado. Esta jugada fue invalidada por la Corte la semana pasada.
La maniobra declarada inválida por la Corte el martes de la semana pasada fue ideada por Cristina Kirchner y consistió en dividir el bloque del Frente de Todos en dos nuevos bloques, Nacional y Popular y Unidad Ciudadana con 21 y 14 miembros, respectivamente, pudieron designar representantes al Consejo de la Magistratura ya que, según la lectura de la vicepresidenta, pasaron a constituirse en la priemra y tercera minorías. De esta manera, postergaron al bloque Pro que, con 9 senadores, quedó como la cuarta fuerza en la Cámara alta.