El idilio duró poco y nada. Y es que, al día siguiente de haber tenido su primer encuentro íntimo dentro de la casa de Gran Hermano 2022, Thiago Medina y Daniela Celis empezaron a descubrir que no eran tan compatibles como pensaban. Desde que comenzó el reality, el joven oriundo de González Catán se mostró interesado en la muchacha de las pestañas siempre perfectas. Pero, según la opinión de los “especialistas” de El debate, ella solo coqueteaba con él como estrategia para permanecer en el certamen. ¿Qué pasó después?
En la última prueba del líder, en la que Thiago quedó entre los tres finalistas junto a Maxi Giudici y Alexis el Conejo Quiroga, Santiago del Moro desafió a Daniela y le propuso que, en caso de que Medina se alzara con el triunfo, le diera el primer pico. Ella aceptó. Y, finalmente, cuando el muchacho logró ganar la competencia, ambos se fundieron en un apasionado beso.
No pasó mucho tiempo para que Thiago y Daniela tuvieran su primera noche de sexo. Después de cumplir con la premisa dar su consentimiento frente a las cámaras, ambos se entregaron a la intimidad bajo las sábanas. Y, de esta manera, parecía haberse consolidado la tercera pareja de la casa, después de la de Maxi y Juliana Díaz y la del Conejo y Coti Romero. Sin embargo, Celis le habría reprochado algunas actitudes a Medina, quien en una charla con sus compañeros de encierro dio a conocer su descontento.
Después de explicar que Daniela pretendía que él estuviera todo el tiempo junto a ella, Thiago señaló: “No me puedo tirar un pe… porque está ahí en mi cama. No puedo eructar porque me dice: ‘No pierdas el encanto’. ¡Dejame ser, piba!”. Así, mientras sus interlocutores le decían que lo mejor era plantearle estas cuestiones a la joven, Medina agregó: “Me pudre, pero no me dan ganas de decirle nada porque no quiero que después se ponga mal o que me diga que yo solo tengo calentura”.
Lo cierto es que, para entonces, Thiago y Daniela ya habían tenido una conversación privada en la que ella le había planteado su firme posición. “Ella me dijo: ‘Bueno, es mejor que termine acá antes de que me enganche más’”. En charla con las chicas de la casa, en tanto, la joven también mostró su disconformidad con las actitudes de Medina, que le parecieron muy inmaduras.
Por otro lado, en la fiesta del viernes Daniela y Julieta Poggio se dieron un apasionado beso a modo de juego. Pero esto generó mucha polémica en las redes sociales, donde los internautas se preguntaron si no se trataba de una infidelidad, dado que mientras una está con Thiago en la casa la otra dejó a su novio, Lucca Bardelli, esperándola afuera.
Tal fue la polémica que se desató que hasta el economista Carlos Maslatón se puso a dar su opinión al respecto. “Ante consultas de numerosos foristas y pese a mi concentración exclusiva en el Mundial 2022. La respuesta es NO, categóricamente no. No constituye infidelidad de Julieta, respecto de su novio fuera de GH, la consumación de este acto sobre Daniela o de otros actos con mujeres.”, expresó contundente. Y agregó: “Y debe recordarse que, desde la prehistoria, al hombre le genera cero molestia y cero desagrado que la mujer con la que mantenga una relación se bese o garche con otras mujeres. Más bien le genera la inversa a la molestia y al desagrado. Es ley de la historia y de la naturaleza”, terminó concluyente el economista que se declaró fanático del programa de Telefe.