El dólar minorista avanzó ayer un 2,86% y cerró a $ 44,92 promedio, en una jornada en la que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) convalidó una suba de tasas de Leliq de 83 puntos básicos al finalizar en un promedio de 67,75% para un total adjudicado de $ 201.445 millones. De esta manera, se generó una expansión de liquidez de $ 8.677 millones.
Desde el 13 de abril la entidad monetaria realiza dos subastas diarias. En el segmento mayorista, la divisa trepó un 2,88% y finalizó a $ 43,87.
Gustavo Quintana, analista de PR Corredores de Cambio, aseguró que el derrape de las monedas regionales se alinearon ayer con los factores locales para generar una fuerte suba del dólar. “Hubo nuevos máximos históricos del dólar en el segmento mayorista, en una rueda que tuvo otra vez a la demanda como principal protagonista”, detalló Quintana.
El analista de PR Corredores de Cambio explicó que el incremento en la cotización de la divisa también se debió a que hubo un principio de compensación y cierre de posiciones que vencen el viernes próximo “que alimentaron la corriente compradora y presionaron sobre los precios del contado”.
Quintana resaltó además que el monto negociado en la rueda de ayer que alcanzó casi los US$ 852 millones “es el más alto del mes”.
En opinión del economista Nery Persichini, con la suba del dólar de ayer, el tipo de cambio real multilateral (TCRM) se acerca a 124, un valor que no se veía desde mediados de octubre. “No le debería quedar mucha nafta. Debería apreciar pronto. Pero puede fallar…”, concluyó.
Criterio del Central
Por su parte, el director ejecutivo y economista jefe de la Unión Industrial Argentina (UIA), Diego Coatz, confió ayer en que la tensión cambiaria se estabilice en abril y mayo y se mostró partidario de que el Banco Central defina un criterio de intervención, para vender dólares en el mercado y que no dependa sólo de la tasa de interés.
En declaraciones radiales, Coatz vinculó la suba de la divisa de los últimos días a un esquema en el que hay más demanda que oferta, hasta que pueda actuar el Tesoro y lleguen los recursos del Fondo Monetario.
El directivo de la UIA cuestionó que la tasa de interés sea el único instrumento para tranquilizar el mercado cambiario y lamentó el impacto en las PyME. “Si la tasa es de 65%, las pequeñas y medianas empresas tienen que pagar 80% por adelantos en cuenta corriente”, precisó Coatz.
“Está claro que es un año electoral y muy difícil desde el punto de vista financiero, con un esquema complejo para la economía real, pero se requiere encontrar un mecanismo que no dañe el tejido productivo”, agregó Coatz. Tras señalar la vulnerabilidad financiera, producto de las tasas que se agudiza semana tras semana, el economista dijo: “al sector industrial no le sirve un dólar que se aprecie fenomenalmente como en 2016, con una inflación de más de 30% y el dólar sin mover, ni tampoco los saltos como el del año pasado, que afectan mucho la actividad”.
Según Coatz, el dólar del ahorro depende de la confianza, que es algo que se construye en el tiempo”, mientras para la competitividad de la industria el valor de la divisa es sólo un aspecto ya que “se necesitan políticas integrales”. (Télam)
Las causas de la escalada
1- El mercado está viendo con mucho nerviosismo las pobres estimaciones de crecimiento de las principales economías a nivel global.
2- En la región se pone en duda el dinamismo que iba a tener Brasil, por el enfrentamiento de Bolsonaro con el Congreso de Brasil.
3- La mayoría de las monedas de los países emergentes como Brasil o Turquía también están cayendo con fuerza frente al dólar.
4- El mercado cambiario local aguarda con nerviosismo la aprobación del FMI para el desembolso de los U$S 10.870 millones.
5- El mercado está a la espera de que los agroexportadores liquiden sus dólares y de que el Tesoro empiece a venderlos.
6- La incertidumbre por el año electoral y la campaña también ha puesto en jaque la confianza de los inversores.