Mientras cuatro gobernadores se suman al planteo que formularon el presidente Alberto Fernández y otros 14 mandatarios peronistas contra el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación para restituir fondos de coparticipación a Ciudad de Buenos Aires, el tucumano Osvaldo Jaldo cargó nuevamente contra los efectos de esa decisión judicial. “Basta de transferir más fondos a los porteños. Este es un país federal”, remarcó el gobernador interino.
En una charla con LA GACETA, Jaldo remarcó que en ningún momento se planteó que había que desobedecer la decisión del máximo tribunal del país, aunque advirtió que sí hay “una imposibilidad cierta y contundente en la aplicación de la medida”, que implicará un desembolso de $ 180.000 millones en favor de la gestión del jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. “No es lo mismo desobedecer que no poder cumplir”, agregó. El mandatario provincial reiteró que tanto el Presidente como sus pares son “respetuosos de la división de poderes, de los fallos de la Justicia y de las instituciones de la República”, pero advirtió que, bajo ningún punto de vista, se puede poner en peligro la asignación de recursos a las provincias. Jaldo precisó que el Presupuesto Nacional 2023 no contempla partida alguna para hacer frente a lo que obliga la Justicia para entregarle a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) el 2,95% de la masa de fondos coparticipables. A través de un documento, el oficialismo expuso su postura al señalar que se trata de “un fallo inédito, incongruente y de imposible cumplimiento”. “El presidente de la Nación ha decidido instruir a los órganos competentes del Estado Nacional a recusar a los miembros de la Corte Suprema y a presentar el pedido de revocatoria ‘in extremis’ de la resolución cautelar dictada”, continúa el texto.
Jaldo explicó también que el Estado nacional no puede asumir más endeudamiento a partir de las metas acordadas con organismos internacionales. Además, recordó que es el Congreso el que puede definir cómo se distribuye el dinero federal. “Se corre el riesgo de paralizar las transferencias de los recursos para que las provincias cumplan con algunos servicios y ejecuten obras públicas”, puntualizó.
A su criterio, el fallo de la Corte tiene ciertas contradicciones e imprecisiones, ya que no señala de dónde saldrán los recursos para atender la demanda que formula la Ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, el gobernador tucumano no pudo evitar un análisis político de la cuestión. “Basta de que los fondos crezcan para CABA. Basta de dar a un solo distrito en desmedro de otras 23 jurisdicciones entre las que hay gestiones que llegaron por Juntos por el Cambio. Esto pone en riesgo el funcionamiento de todo el país”, remarcó. Además, consideró que hay cierto favoritismo en la decisión. “No puede ser que ellos sean de primera y nos condenen a nosotros a considerarnos de cuarta”, fustigó.
Además de los 14 mandatarios peronistas que acudieron ayer a la cumbre con el Presidente (cuatro lo hicieron a través de zoom), otros cuatro mandatarios se pronunciaron en contra del fallo.
“Estamos convencidos de que ninguna jurisdicción, en este caso CABA, debe percibir recursos por encima del costo real de las nuevas responsabilidades que le fueran asignadas; pero también sostenemos firmemente que esos fondos nacionales, al momento de ser retrotraídos deben indefectiblemente ser distribuidos de forma absolutamente federal y equitativa entre todas las jurisdicciones que conformamos la Nación Argentina”, manifestaron a través de un documento los gobernadores Gustavo Sáenz (Salta), Arabela Carreras (Río Negro), Omar Gutiérrez (Neuquén) y Oscar Herrera Ahuad (Misiones). “Cuestiones como estas no hacen más que profundizar la falta de genuino federalismo que las provincias del interior padecemos desde hace décadas y que se materializan en inequidades y desproporcionadas asimetrías”, indicaron.
