El cortejo fúnebre de Víctor Emanuel Lazarte pasó frente a la Casa de Gobierno este miércoles. Familiares y allegados reclamaron Justicia por el asesinato del joven policía en el barrio Juan Pablo.
Además alrededor de 200 cadetes llegaron esta mañana a la Casa de Gobierno para pedir más medidas de seguridad y aseguraron que siguen sufriendo robos cuando salen a trabajar por las calles tucumanas.
Lazarte salió de su casa el lunes pasadas las 20.30 para parchar una de las ruedas de su motocicleta. Cuando regresaba, alrededor de las 21.30, cuatro motochorros lo rodearon para robarle su moto y a 20 metros de su domicilio, ubicado en el pasaje Valdez del Pino, a la altura de la avenida Silvano Bores al 1.000, le dispararon a quemarropa causándole heridas mortales, para luego huir sin llevarse el rodado.
Hay dos versiones sobre el motivo de los disparos: una indica que el agente, que estaba de civil y desarmado, intentó resistirse al robo y uno de los delincuentes le disparó a quemarropa. La otra, que los asaltantes lo conocían y al descubrir quién era lo atacaron a balazos.