El martes pasado, el presidente Alberto Fernández llegó a Tucumán para inaugurar el nuevo edificio de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia en la Quinta Agronómica de la Universidad Nacional de Tucumán.
En un anfiteatro semivacío, el evento contó con la presencia de autoridades provinciales y universitarias. Sin embargo, la conferencia de prensa fue impedida por el encierro de los periodistas. En las redes sociales, circula un video que revela los detalles detrás de escena y la supuesta verdad sobre el nuevo edificio.
El secretario general de la Universidad Nacional de Tucumán, José Hugo Saab, destacó que esta inauguración había sido planeada a nivel nacional desde hace algún tiempo debido a la finalización de la obra. En compañía del ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, el presidente llegó y juntos cortaron la cinta del edificio. También estuvieron presentes el gobernador Juan Manzur, el rector Sergio Pagani, la decana de Bioquímica, María Inés Gómez, y el secretario de Políticas Universitarias de la Nación, Oscar Alpa.
La Universidad Nacional de Tucumán designó a las obras como Etapa I del proyecto “Completamiento de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia” y resaltó que se llevaron a cabo gracias al Programa de Infraestructura Universitaria, resultado de la colaboración entre los ministerios de Educación y Obras Públicas de la Nación.
En ese marco, detalló: “La Etapa I está conformada por 6 Aulas comunes con distintas capacidades; Biblioteca con salón de lectura grupal parlante con computadoras, Salón de lectura individual silencioso con computadoras; Hemeroteca con computadoras y aula multimedios; Áreas de Administración y Decanato; Sala de Sesiones del Honorable Consejo Directivo y salas menores para reuniones de sus comisiones permanentes; Bar-Comedor y dos Núcleos Sanitarios”.
El rector Pagani destacó: “Es una obra de unos $ 1.000 millones; estamos trabajando para conseguir financiamiento y continuar este proyecto; este es ahora nuestro objetivo. La mudanza de la Facultad hacia este predio va a ser parcial por cuanto esta obra es una primera etapa, y los espacios que deje la gente de Bioquímica una parte quedará para la Facultad, en lo que le haga falta, y en otra parte funcionarán áreas del Rectorado”.
La vicerrectora Mercedes Leal celebró: “Estamos sumamente felices porque la inversión que hace el Estado Nacional para sostener la infraestructura universitaria es fundamental. No lo podría hacer solamente la UNT. Entonces, yo inscribo este aporte y este acto en una política de Estado, del tesoro nacional, para sostener la matrícula de las universidades nacionales. Estamos muy felices porque representa una política de ampliación de la matrícula, tanto de las escuelas como de las unidades académicas. Con este acto se abrirán las instalaciones para que los/las estudiantes de primer año de la facultad puedan concurrir y estar acá en este nuevo hábitat que es el fin de la universidad”.
Además, se refirió a la Etapa II del proyecto: “estimamos que será por un monto similar al de la Etapa I; eso va a representar que puedan mudarse también todas las otras instalaciones que están dispersas de la Facultad de Bioquímica. Así que también estamos dando la posibilidad de un trabajo articulado con los institutos de investigación que han sido señeros para la Universidad Nacional de Tucumán”.
Toda esta algarabía universitaria contrasta con las imágenes que muestra el detrás de escena del acto de Alberto Fernández en la UNT, que dan cuenta de una obra inconclusa e incompleta.
El video viral de la obra que inauguró Alberto Fernández en la UNT:
