Hasta pasado mañana, cada vez que los tucumanos miren el cielo se encontrarán con lluvias. El clima no dará tregua, según el meterólogo Juan Minetti, del Laboratorio Climatológico Sudamericano, quien confirmó que “hasta el miércoles aproximadamente habrá lluvias y chaparrones intercalados con tormentas como las de este fin de semana en toda la provincia, sobre todo en el este y el sur”.
“La nubosidad se mantendrá desde el centro de Bolivia hasta Córdoba, está todo el cielo cubierto y hay chaparrones intermitentes por lo que no sorprende la persistencia de estas lluvias, lo más probable es que continúen hasta el miércoles”, explicó el meteorólogo.
La máxima de hoy no superará los 21°, según el SMN.
En la provincia, como consecuencia de las precipitaciones algunos caminos y rutas quedaron inundados imposibilitando el paso y aislando a determinadas comunidades. En este contexto, algunas familias debieron ser evacuadas por precaución.
Las áreas más comprometidas fueron el este de Tucumán, más que nada en la sierra y en la zona de Burruyacú, Cruz Alta, Leales y Simoca. Las consecuencias de las precipitaciones se pudieron ver fundamentalmente en el departamento de Burruyacú, donde solo el sábado se registraron alrededor de 200 milímetros de precipitación.
En la zona de El Rodeo, las lluvias fueron tan intensas que inundaron propiedades y caminos, arruinando muebles y plantaciones.
“Las lluvias están siendo muy irregulares e intermitentes, mientras acá en capital cayeron 40 milímetros, en la capital de Santiago del Estero cayeron 3 milímetros y en Salta 200” señaló Minetti.
Según los datos reunidos por la Estacion Experimental Obispo Colombres, las áreas con mayores precipitaciones fueron al este de la provincia con un promedio de 60 milimetros acumulados en 24 horas.
Con respecto al impacto que la lluvia tendrá para el sector agropecuario, el meteorólogo destacó que las precipitaciones fueron muy irregulares y no se determinó la cantidad de agua que cayó y la forma.
“El pronóstico decía que la zona central y serrana del noroeste argentino iba a tener mucha agua en toda la zona. Todavía no sabemos la cantidad que cae y la forma en la que cae por lo que no podemos determinar si es beneficioso pero sí hubo mucha agua”.
Mientras las precipitaciones parecían no terminar, la temperatura en la provincia alcanzó los 22° con una mínima de 18° y una humedad del 98%, representando un gran descenso de temperatura en relación a la semana pasada.