Una beba wichi, de apenas un año y once meses, murió en las últimas horas en el norte de Salta por desnutrición en un cuadro agravado, además, por dificultades respiratorias.
La pequeña que vivía en el paraje Santa María, pesaba 7,270 kilogramos y falleció por un paro cardiorrespiratorio en el hospital de la localidad de Santa Victoria Este, el mismo sitio donde hace pocos días había muerto otro menor por desnutrición.
Con esta muerte, ascienden a ocho los niños que murieron desnutridos y deshidratados en lo que va del año, en el norte salteño, por lo que fue declarada la emergencia sociosanitaria en los departamentos Rivadavia, San Marín y Orán.
Días atrás, el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, calificó como “muy crítica” la situación originada por la falta de agua potable y la desnutrición en niños de comunidades wichi de la provincia de Salta.
Según indicó en una entrevista con TN.com.ar el italiano Roberto Valent, máxima autoridad de Naciones Unidas en la Argentina, en Salta “hay 855 niñas y niños desnutridos, de muy bajo peso, hay 10 mil chicos en riesgo nutricional y hay más de 100 mil adultos en el mismo riesgo”. “El acceso a los alimentos, al agua y a la salud es claramente un tema problemático para Salta en este momento”, agregó.
Según el último censo de 2010, la población wichi en Salta ronda los 20.000 integrantes, lo que la convierte en la etnia mayoritaria de los pueblos originarios que habitan la provincia, que en su conjunto representan el 6,5% de la población salteña.
