El tango es un género musical que atraviesa las edades y convoca tanto a hombres y mujeres a aprenderlo y a practicarlo. En el caso de los adultos mayores puede ser una herramienta de bienestar emocional y físico.
La Dirección de Adultos Mayores que funciona en avenida Sarmiento 1241, brinda diferentes talleres gratuitos, uno de ellos es el de tango, que durante el año llega a tener entre 25 a 30 alumnos, durante estas primeras semanas del mes de enero se redujo a 20 personas.
La directora de Adultos Mayores de la Municipalidad capitalina, Telma Iñigo informó que “el taller de tango se dicta todos los martes de 18 a 20.30 hs, está a cargo del profesor Rivas. Este taller se va a dictar durante enero y febrero, pero es un continuado de lo que se viene dictando todo el año. Invitamos a todos los adultos mayores que se quieran sumar, pueden hacerlo. Además recordó que “hay una oferta variadas de propuestas, en enero y febrero se están dictando los talleres de tango, cocina, reciclado y arte decorativo”.
Iñigo también informó que le Dirección a su cargo cuenta con un “departamento jurídico donde le brindamos orientación a todos los adultos mayores sobre temas en los que ellos tengan dudas, la finalidad es ayudarlos con algunos trámites, a responder algunos oficios, entre otros”.
Lucía Daluz, alumna del taller de tango destacó que “las clases de tango me hacen muy bien, el tango me apasiona es un trabajo mental, emocional y físico. Yo empecé hace muchos años, dejé y retomé nuevamente porque acá encontré un ambiente hermoso. Me hace bien emocionalmente, me lleva a compartir porque el tango es sociabilizar, es todo un aprendizaje, no es fácil pero el resultado es hermoso, estoy agradecida por el espacio que brindan desde la Municipalidad”.
Por su parte Aldo Escobar, quien también participa del taller de este género musical tan reconocido a nivel mundial, dijo que para el “es un hobby, lo vengo practicando desde hace muchos años, es una pasión lo que se tiene por el tango, no hay forma de decirle que no. Tenemos un gran grupo que se formó aquí, después de la práctica hacemos una juntadita a la que llamamos milonguita para seguir bailando”.
