Un hecho insólito se registró en Vicente López durante la noche del sábado, cuando dos jóvenes, que aprovecharon una distracción, se robaron un patrullero de la Secretaría de Seguridad Municipal. Lo manejaron por 30 cuadras y grabaron toda la secuencia, hasta que lo abandonaron en San Isidro. Luego, subieron el video a redes sociales y se viralizó.
De acuerdo a la información, los efectivos de la policía local llegaron en el móvil a un bar ubicado en Maipú al 3800 por una denuncia por disturbios en la vía pública. Cuando estaban interviniendo para tranquilizar la situación, advirtieron que el patrullero no estaba en el lugar en el que lo habían estacionado, indicaron fuentes del caso a Infobae.
En ese mismo momento, dos jóvenes se filmaban con un celular a bordo del patrullero que habían robado. El acompañante llevaba dos vasos de plástico con cerveza. La conversación que se da dentro del móvil también fue registrada por el micrófono de teléfono.
“Ya fue amigo, nos bajamos acá ya mismo”, intenta disuadir el acompañante al conductor. Sin embargo, el joven al volante se niega: “Podemos hacer un par más”. “Con las dos birras, no puede ser boludo”, se ríen. “No se baja la ventanilla acá, boludo”, observa uno de ellos. “Ya fue, dejálo acá”. Tras un insulto por la “picardía” que ambos llevaron a cabo, dejaron el auto detrás de otro y frente a un cartel de “prohibido estacionar”. “¿Qué pasa? No viste que piloteo yo esa”, dice por último el conductor en tono de broma, mientras se alejan del patrullero que fue ubicado en Avenida Santa Fe y Belisario Roldán, frente al Hipódromo de San Isidro.
Fuentes del municipio indicaron a este medio que los vehículos utilizados por la fuerza de seguridad cuentan con cámaras internas, por lo que los dos jóvenes fueron identificados e imputados por “hurto”.
Explicaron, a la vez, porque no fue necesaria una persecución para dar con el móvil. “En las patrullas tenemos un sistema de videovigilancia interna que graba video y audio en todo momento, además con el GPS y las cámaras de la avenida, por esa razón, no hacía falta perseguirlos para saber su recorrido”, detallaron.
Al mismo tiempo, recordaron que se trata de vehículos blindados, “si el conductor emprende una huida a alta velocidad, puede perder el control del vehículo y causar una desgracia mayor”, señalaron.
Un hecho similar ocurrió, hace un mes, en la localidad de General Cabrera, en Córdoba, cuando tres jóvenes robaron un patrullero y lo volcaron a un costado de la ruta. El episodio comenzó el día anterior, cuando arrestaron a dos hombres por participar de una pelea. Al día siguiente, tres allegados de los detenidos treparon el muro de la comisaría y, una vez en el patio, se apropiaron de un patrullero que pertenece al destacamento de Olaeta y derribaron un portón de chapa para escapar.
“Fue una suerte de represalia. Como sus amigos estaban presos por una pelea ocurrida horas antes, en vez de atacar la comisaría, se metieron y se robaron un móvil”, explicaron fuentes judiciales en diálogo con La Voz.
