Luego de varias horas de tensión, efectivos policiales de la Regional Este lograron desalojar a un nutrido grupo de personas que protagonizaron una usurpación de terrenos en jurisdicción de la comuna de Estación Araoz.
“Estamos teniendo muchos robos en zonas donde antes era muy tranquilo. También hemos intervenido en varios casos de desalojos de personas que se instalaban cerca de las vías, ya sea invadiendo los edificios de las ex estaciones o bien iniciando construcciones”, indicó el comisario Carlos Daniel Ruiz, jefe de esa unidad.
El uniformado valoró que desde que existen en la provincia fiscalías especializadas en Usurpaciones están consiguiendo mucho más rápido las órdenes de desalojo, lo que ayuda a la prevención y a la resolución de estos casos.
“Antes estos eran procesos eternos hasta poder desalojar. Muchas veces había hasta abogados y estudios jurídicos trabajando con documentación falsa. Además el nuevo sistema nos ayuda a evitar que un efectivo tenga que recibir una agresión para poder dispersar a la gente porque ahora hay órdenes claras de desalojo y se otorgan rápido”, valoró.
Los fiscales Carlos Saltor y María del Carmen Reuter son quienes intervienen en este tipo de casos.
El viernes los empleados de la comuna de Estación Aráoz encargados del desmalezamiento notaron que varias familias comenzaban construcciones precarias cerca de las vías.
Los trabajadores les informaron a esas personas que estaban instalándose en terrenos estatales pero los invasores les respondieron que no se irían y los corrieron.
La misma respuesta tuvieron los dos policías de ese pueblo que fueron a intentar poner orden.
Luciana Manrrique, auxiliar de una de las Fiscalías especializadas, acudió al lugar acompañada por el comisario Daniel Medina que estaba a cargo de hacer cumplir el desalojo ordenado por la Justicia.
La letrada les explicó a los ocupantes que no podían establecerse en esos terrenos, que son de la Nación. La Policía advirtió en el informe que incluso había personas manipulando el tendido eléctrico para hacer una instalación clandestina, lo que representaba un grave peligro para personas y animales.
Hubo algunos disturbios, un joven intentó dañar una de las patrullas y otro, que sufría epilepsia, empezó a convulsionar pero luego se estabilizó y se negó a recibir ayuda. Finalmente los ocupas se retiraron y los investigadores identificaron a Lourdes Medina (35 años), Natalia Medina (35) y a una adolescente de 17 como las supuestas impulsoras de esta usurpación.
Lo que generó sorpresa y sospechas, fue que las dos últimas provenían de barrios periféricos de la capital, detalle que empezó a aparecer como denominador común en este tipo de hechos.
El último día de julio, la Comuna de El Naranjo denunció una usurpación de tierras en la zona de Las Tranquitas. La comisario Gilda Villagra, y su equipo fueron a revisar el lugar y se toparon con 20 personas que habían desmalezado el predio y lo habían segmentado en lotes con alambres y palos.
La uniformada les informó a los invasores que debían irse para evitar problemas con un desalojo. Las personas presentes se ofuscaron y manifestaron que habían sido desalojados de otro lado y que allí ya habían limpiado el predio, instalaron alambrados e incluso habían edificado algunas viviendas precarias con palos, silobolsas y otras piezas que encontraron desechadas.
Al final, los ocupas se negaron a identificarse, pero accedieron a la orden (verbal) de que se retiraran y que gestionaran la adquisición de esos terrenos por la vía legal.
El comisario Ruiz contó que “hemos tenido problemas con unas familias que vienen de la zona del Mercofrut y que las dirigen un clan conocido como los “Zapalleros”.-
Los mencionados trabajan en las verdulerías, pero también son gente agresiva. “Este nuevo sistema nos ha permitido ir identificando a quienes organizan estos despliegues de toma de tierras y muchas veces se trata de mujeres”, detalló.
“En San Andrés identificamos a tres señoras que intentaron ocupar tres predios, los lotearon y estafaron a personas que compraron de buena fe. Terminaron detenidas y ahora tienen que ir a una mediación para ver cómo devuelven el dinero”, concluyó Ruiz.