Atlético Tucumán se jugaba un partido clave para la clasificación para las Copas contra el mismo objetivo de su rival en Santa Fe: Unión. Luego de un buen primer tiempo con las situaciones más claras para el Decano, la imagen cambió en el segundo tiempo y el Tatengue se impuso por 1 a 0 con gol de Jerónimo Dómina.
Fue un primer tiempo jugado a todo o nada: de ida y vuelta, movido, electrizante pese al calor y con situaciones de gol para cada equipo. Pero la más clara fue la de Mateo Coronel a los 29 minutos del primer tiempo y de Ferrari en tiempo de descuento.
Unos minutos antes, Rocky Balboa también había saltado más que todos en el área Decana y el cabezazo dio en el poste ante la mirada y la plegaria de Tomás Durso.
La pelota no quería entrar para el Decano y una muestra más de ello fue el tiro libre de Marcelo Estigarribia sobre el final del primer tiempo y una jugada inexplicable de Gianluca Ferrari solo ante el arco del Tatengue. Sin goles se fueron al descanso.
El segundo tiempo fue otro cantar: el Decano no salió de la misma manera y encima perdió a Gianluca Ferrari, expulsado por Tello en una acción que trajo polémica.
El tremendo calor de Santa Fe también empezó a jugar su partido, salió Estigarribia, el Decano se quedó sin piernas, empezó a pegar más de la cuenta, se llenó de amarillas y el gol del local estaba al caer.
A los 28′, Dómina puso el 1 a 0 de cabeza y ya el equipo de Sava no encontró respuestas físicas ni futbolísticas para llegar al empate. Sin contundencia ni suerte en el primer tiempo, la historia se inclinó para el Tatengue en el complemento. Golpe a la ilusión y lejos de las Copas.