Desde que la expresidenta Cristina Kirchner tomó la decisión de aumentar su exposición pública, crecieron a la par las especulaciones sobre su futuro político. Más aún cuando se postuló para conducir el Partido Justicialista, ante la sorpresa de propios y ajenos. Ya confirmada al frente del PJ, retoma un liderazgo político que es utilizado también por el presidente Javier Milei para polarizar. Y hoy, esa situación beneficia a ambos.
El caso es que con CFK bajo los reflectores, crecen los rumores sobre una posible candidatura en 2025. Claro que falta mucho para definir listas para las legislativas del año que viene. Y un dato no menor: la Cámara de Casación Penal definirá este miércoles si deja firme o no la condena a seis años de prisión de Cristina Kirchner en el caso conocido como “Vialidad”. La propia expresidenta ya se da por condenada y habla de “proscripción de por vida”.
Ante este panorama, la flamante titular del PJ no tiene planeado quedarse quieta. En los últimos dos meses inició un despliegue territorial con foco en la provincia de Buenos Aires, pero que se extenderá a distintos puntos del país en las próximas semanas. En el entorno de la expresidenta aseguran que “ella viene planteando que hay que bajarse un poco de los escenarios y caminar la calle”. Busca tener apariciones espontáneas, “sin aparato”.
Y tampoco descuida los mensajes a los propios. La reunión de este martes en SMATA fue con buena parte de lo que será el próximo Consejo Nacional del PJ, todos representantes de lo que era la lista de CFK para competir en las internas del Partido Justicialista. Sin embargo, el objetivo de flamante conductora del peronismo es ampliar esos encuentros.
Cristina Kirchner espera que en la próxima reunión del PJ estén todos los peronistas y que esa reunión se haga en la sede del partido a nivel nacional. Pragmatismo y unidad, reflejado en la histórica frase de que “para un peronista no hay nada mejor que otro peronista”. “Va a seguir instalándose, sin centrarse en ninguna cuestión interna”, indicaron en las filas K, aunque aclararon: “Pero ya con moverse, ordena los patitos”.
Sucede que ya resuelta la interna, el foco debe estar en enfrentar al gobierno de Milei. “Ella decidió ser la jefa de la oposición en la Argentina. Ratificar su liderazgo. No va a esperar a la asunción del PJ”, remarcó un dirigente que conoce a CFK desde los inicios del kirchnerismo. “Eso no se lo da el cargo, es solo la validación de algo que ya tenía”, aclaró.
Asimismo, la expresidenta busca que, en el marco del PJ, se consolide un Instituto de planeamiento de políticas públicas. Y además, trabajar en avanzar con la afiliación digital. En el fondo, propone un reordenamiento del partido, en todos los órdenes. Desde las prácticas más básicas hasta aquellas cuestiones de fondo. Convertir el sello en una institución.
“No está vinculando su actividad a la proscripción, es algo que está pasando en simultáneo. Incluso puede pasar al revés, que busquen proscribirla porque se está moviendo”, indicó a este medio un referente K. Y remarcó: “Ella tuvo más contacto real con la gente en estos dos meses que el que tuvo Milei desde que empezó su gestión”.
Aún temprano para analizar movimientos, en el kirchnerismo no descartan que el año que viene -y más también- ella juegue electoralmente. “Va a dejar correr todas las teorías, si es candidata o no. No va a decir nada”, aseguraron. Todo dependerá de cómo llegue el Gobierno en cada instancia.