El caso se encuentra a cargo de la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos II, a cargo de Susana Cordisco, quien en esta ocasión fue representada por su auxiliar Emilia Arias Ferrero. En el marco de una audiencia llevada adelante ayer, la investigadora formuló cargos y pidió medidas de coerción en contra de un sujeto de 31 años.
La teoría del caso plantea que el pasado domingo 10 de noviembre, al mediodía, el imputado se hizo presente en una estación de servicio ubicada en avenida Alem y Lavaissé (capital), subió a los techos y cortó un cable de luz que ocasionó un corte de energía eléctrica que abastece al bar.
Esta situación fue advertida por los empleados, que le avisaron a un socio del establecimiento. Éste observó que el acusado estaba en el techo con un cuchillo, una pinza y un cable cortado en sus manos. Le pidió que se quede quieto, pero el malviviente emprendió la fuga sin lograr apoderarse de los cables que había cortado, siendo perseguido por este hombre y un empleado.
Cuando lograron verlo en Lavaissé al 1200, el socio de la estación fue lesionado en su mano derecha por el imputado con un elemento cortante, ocasionándole una herida de 4 cm. aproximadamente. Acto seguido, volvió a huir, sin embargo, terminó siendo reducido por vecinos de la zona, en inmediaciones de Bernabé Aráoz e Inca Garcilaso. Personal policial luego trasladó al delincuente al Centro de Salud, donde quedó aprehendido.
La Fiscalía le atribuyó ser presunto autor del delito de robo doblemente agravado por haber sido cometido con arma y escalamiento, en grado de tentativa. A su vez, Arias Ferrero requirió que se ordene la prisión preventiva por el plazo de un mes. El juez aceptó parcialmente la solicitud fiscal y dispuso la preventiva, pero bajo la modalidad de arresto domiciliario.
