Si bien a la ciencia aún le falta reunir más evidencia científica para concluir -como ya sospecha y señala el consenso de la comunidad médica- que el consumo de cigarrillo electrónico es un producto dañino para la salud; el vapeo juvenil sostenido en el tiempo y percibido por ellos mismos como inocuo, se instala cada vez con más fuerza entre los jóvenes del mundo, como una tendencia sociocultural, y a la despierta preocupación entre los médicos e investigadores; impulsando investigaciones con datos precisos que no tardan en llegar .
“Es bastante preocupante el crecimiento y no es casual, porque la industria tabacalera al ir viendo que ha descendido el consumo del cigarrillo convención, empezó a invertir en estos medios electrónicos con propaganda muy engañosa, queriendo vender como que es un vapeo y la verdad que no lo es”, alertó en LV12 la neumóloga Cristina Gaitán.
En este sentido, indicó que “es dañino, incluso más que el cigarrillo convencional porque tiene muchos químicos. Los venden con aromas cautivantes para que se crea algo lindo pero está lejos de serlo”.
El cigarrillo electrónico está prohibido en Argentina
Luego de haber realizado una nueva evaluación sobre los efectos del llamado cigarrillo electrónico, la ANMAT ha decidido ratificar la prohibición para importar, distribuir y comercializar dichos dispositivos y todos sus accesorios (incluyendo los líquidos para recargarlos), como así también la publicidad de los mismos.
“Es un dispositivo que tiene un contenedor donde le ponen los líquidos y no siempre contienen lo que dicen. Tienen nicotina, propilenglicol y colorantes. Entonces todas esas cosas que no están preparadas para el aparato respiratorio, lo dañan”.
