Ocurrió esta mañana en las lagunas que se formaron en el acceso a la localidad de Cierri; se trata del chofer que era buscado, junto a dos hermanitas, en la zona
BAHÍA BLANCA.– Un nuevo cuerpo se encontró esta mañana, en este caso, el de un hombre, en un curso de agua que cruza el camino de acceso a la vecina localidad de Cerri y eleva a 16 la cifra de víctimas mortales que provocó el devastador temporal de lluvia que castigó a gran parte de este distrito.
Por la tarde, el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, confirmó que se trata de Rubén Zalazar, el chofer de una empresa privada de transportes al que se vio, el pasado viernes, rescatar a dos niñas de 1 y 5 años, identificadas como Delfina y Pilar Hecker, cuyo paradero todavía se desconoce.
El cadáver fue recuperado hoy, ya con aguas más calmas y a partir del trabajo de una patrulla de rescate de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, que dio con el cuerpo semihundido, calzado en un remanso contra una zona de abundante vegetación.
Mauro V. Rizzi
El rastrillaje continúa ahora con foco en las dos hermanitas, en las lagunas que quedaron en el acceso a Cerri, a unos 15 kilómetros al sudeste de esta ciudad. El intendente local, Federico Susbielles, fue pesimista respecto de la situación: “Hay una denuncia realizada y un registro visual que nos hace presumir, lamentablemente, un mal desenlace”.
Personal de bomberos y cuerpos especializados en riesgos especiales se desplegaban con kayaks y, donde se podía, paso a paso, con las piernas sumergidas hasta las rodillas o algo más, en busca de algún rastro de ellas. También se apeló al amplio recorrido de drones, equipos que por aire y con cámaras permiten extender el alcance de imágenes.
Zalazar y las hermanas Hecker eran las tres personas buscadas formalmente, según informó más temprano Alonso. La camioneta en la que viajaba el primero y el automóvil en el que iban las niñas con sus padres, Andrés y Marina, quedaron en el medio de un imponente espejo de agua, a 300 y casi 500 metros de la ruta 3.

Facebook/Mariana Hecker
El Ministerio de Seguridad bonaerense había confirmado a última hora de este sábado un total de 13 muertes, con 11 de las víctimas identificadas. Sorprendió en ese parte el reconocimiento de “103 llamados al 911 tipificados como desaparición de personas”, pero desde la gobernación aclararon que “son los llamados recibidos y atendidos desde el comienzo de la tragedia, mayormente producto de gente desencontrada”.
Y detallaron: “Que por falta de luz, mal funcionamiento de celulares o porque está en otro lugar que no sea su casa, no se puede encontrar con quien lo busca y, ante semejante situación, la gente llama para pedir ayuda”.
Mauro Rizzi
Así, confirmaron esta mañana que hasta el momento los únicos desaparecidos identificados eran las niñas Hecker junto con Zalazar. No obstante, las fuentes agregaron: “Pero al bajar más el agua, capaz haya otras novedades”. En ese sentido, Susbielles informó en conferencia de prensa otros dos fallecidos por el temporal y un total de 15; luego, un parte de la gobernación bonaerense elevó la cifra a 16 y finalmente Alonso identificó a esta última víctima como Zalazar.

Facebook/Mariana Hecker
El comunicado anterior había elevado la cantidad formal de desaparecidos a cuatro: “Dos menores y dos mayores”. Tres serían las niñas Hecker y el tercero, Zalazar. No se brindó información sobre el cuarto desaparecido admitido por las autoridades. Tras el hallazgo del cuerpo del chofer, se informó que continúa la búsqueda de tres.
Recién este sábado por la tarde se repuso el suministro de energía eléctrica en algunos barrios, puntualmente en la periferia de Bahía Blanca. En el centro y microcentro se estima que tendrán que esperar varios días hasta que se sequen y revisen las cámaras de distribución que quedaron inundadas o destrozadas, como ocurrió con tantas arrasadas por el volumen de agua que corría y los autos y otros elementos arrastrados por la correntada.
Fuentes policiales confirmaron a LA NACION que las operaciones de búsqueda puntuales están orientadas a aquellos casos en los que los denunciantes dieron precisiones de pérdida de contacto en situaciones de emergencia real.
🔷 Dos niñas de 1 y 5 años están desaparecidas
Delfina y Pilar se encontraban a bordo de una camioneta que quedó varada en medio del agua.
📺 En #EspecialDomingo por LN+. pic.twitter.com/s5r3CI6q06
— La Nación Más (@lanacionmas) March 9, 2025
Uno de ellos era el chofer de la firma Andreani,, que recibió a las dos hermanitas de brazos del padre de ellas, en medio de un torrente que corría con violencia en la ruta 3, en cercanías de Cerri.
De acuerdo con el testimonio de familiares de las niñas, ambas viajaban con sus padres en un auto particular cuando los sorprendió el temporal. Los asistió Zalazar. Quiso agarrar a las menores a su combi, pero se le habría hecho imposible por la potencia del curso de agua, que terminó arrastrando a los tres. Solo la madre, Marina, logró escapar a pie y en medio de campos anegados, por detrás de un desarmadero. El matrimonio se reencontró luego y recorrió centros de evacuación, sin novedades de las menores hasta el momento.
El vehículo de la empresa de transporte de encomiendas se ve hoy con agua hasta la mitad de la carrocería, en el corazón de una inmensa laguna que se formó a la vera de la ruta, del otro lado de las vías, donde además quedó colgado un camión con acoplado. A relativa distancia se ve otro automóvil, volcado. Y algo más cerca de la ruta, el Gol Trend en el que iban las niñas con sus padres, a pocos metros del camión.
Mauro V. Rizzi
Tras el hallazgo del cuerpo de Zalazar, las expectativas no son las más optimistas sobre la suerte que habrían corrido las dos niñas, tal como expresó el intendente. Es este el caso que mayor preocupación genera entre quienes están afectados al operativo de rescate y búsqueda de personas que fueron víctimas de este inédito temporal para Bahía Blanca.
El agua corre allí, ahora mucho más lenta, por un canal que atraviesa por debajo al camino de ingreso a Cerri. De un lado y otro de esa estructura se repartía casi medio centenar de efectivos, con una decena de ellos navegando donde se podía a puro remo y otros entre fango y zonas de menor profundidad, tanteando con bastones aquello que no estaba a la vista.
Los testimonios recogidos durante estos días dan cuenta de la desesperación que generó el temporal, con la caída desde media madrugada del viernes de más de 300 milímetros en pocas horas, luego convertidos en un literal río que corría por las calles y llegó a media mañana a las localidades vecinas, principalmente Cerri e Ingeniero White, más bajas y por ende mucho más afectadas. Mayoría de los más de 1000 evacuados en estos días habitaban en esas comunidades.
En busca de un lugar seguro, sin posibilidad de comunicación por equipos móviles, los vecinos se dispersaron. Así fue que incluso miembros de una misma familia perdieron contacto. La situación se extendió en el tiempo y recién en las primeras horas de este domingo se confirmaba una señal de telefonía celular algo más firme en calidad y amplia desde lo geográfico.