El gobierno no sabe cómo salir de su propia trampa en lo que hace al tipo de cambio oficial del dólar. En el día de ayer, la presión cambiaría llevó al dólar blue a ubicarse en los $136 quedando, de esta manera, a tan solo $4 del récord. Y es que le errática política monetaria del oficialismo redunda en una incesante venta de reservas por parte del Banco Central (BCRA) con el fin de lograr equilibrar la oferta en el mercado cambiario formal.
Además, el establecimiento de mayores restricciones para la operatoria de los denominados “coleros virtuales” no hicieron más que aumentar la tensión en la plaza cambiaria local. La misma está apenas contenida por un férreo cepo cambiario, el cual no logra impedir que las divisas continúen abandonando a la máxima entidad monetaria que tiene el país. A todo esto, el mercado huele sangre y la especulación se hace febril.
Los operadores de la city porteña coinciden en que el Banco Central va reduciendo cada vez más el margen de maniobra que tiene. Al mismo tiempo, los analistas aseguran que esta situación pone entre la espada y la pared al BCRA, ya que sólo quedan dos caminos entre los cuales optar si no quiere continuar dilapidando reservas. Uno es, como ya anunciamos, el que va directamente hacia la devaluación del peso.
Es justamente la opción por la que no quiere optar el Gobierno nacional, ya que no sólo implicaría una caída el poder adquisitivo de las personas. Sino que, además, provocaría una aceleración inflacionaria que hasta el momento logró ser contenida a partir de los controles de precios. A lo cual también ayuda el Indec por medio de las mediciones mentirosas en las que estaría incurriendo el organismo con tal de intentar ningunear la realidad.
Por otro lado, el camino restante sería la opción de aplicar más impuestos a la adquisición del dólar para ahorro. Cabe recordar que ya se aplica un gravamen del 30% a la adquisición de la moneda extranjera, el cual, combinado con el precio oficial al que lo cotiza el Banco Central, llega a los $100. El cual se trata de un valor relativamente barato, si se tiene en cuenta que en la mayoría de las cuevas clandestinas, el dólar se expende a $136.
La incertidumbre económica no hace más que calentar los motores de la especulación, por lo que los ahorristas se vuelcan de forma masiva a la adquisición de la cotizada moneda extranjera. Pero no son los únicos que descreen del Gobierno, ya que el mercado también se plegó a este sentir. En ese sentido, saben que la negociación del Poder Ejecutivo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) será larga y difícil y de resultado imprevisible. Por esa razón, los bonos argentinos, así como también las acciones de empresas locales que cotizan en Bolsa, continúan a la baja. Y es que nada parece generar esperanza a los diversos actores económicos, en la medida en que el Gobierno no blanquee la existencia de un plan o de un paquete de medidas que lleven tranquilidad al sector financiero, así como también a toda la sociedad. Mientras ello no ocurra, el dólar seguirá siendo reserva de valor para los argentinos.
