Con Tesla construyendo su primera megafábrica en las afueras de Berlín, Alemania, la compañía estadounidense es sin duda uno de los grandes rivales a vencer por las automotrices tradicionales, ahora ya lanzadas a la electrificación.
En ese contexto, una reunión entre los “capos” de Tesla (Musk) y Volkswagen (Herbert Diess) despertó todo tipo de comentarios. Fue cuando de la marca alemana lo invitaron, con reserva, a manejar el ID.3, un auto que será un rival del Tesla Model 3.
Además, Musk pudo ver el ID.4 definitivo, el crossover basado en el ID.3 que será un rival de su Model Y (que a su vez está basado en el Model 3). Diess compartió varia imágenes en sus cuentas oficiales.
Según el portal Diariomotor, la sospecha más fuerte -desde ya extraoficial- es una colaboración que bien podría tener a la plataforma MEB de Volkswagen (la desarrollada para autos eléctricos), ya que Tesla busca tener un modelo más accesible.
Como contrapartida, una teoría señala las baterías. El gigante estadounidense las fabrica y una vez inaugurada las producirá en Europa, y más específicamente en Alemania.
El ID.3 está a punto de llegar a la calle en Europa. Para la marca será una suerte de Golf del nuevo siglo, ya que busca “democratizar” (al menos un poco) la compra de autos eléctricos.
Teorías al margen, la imagen de Musk bajando del ID.3 es fuerte, ya que es, al día de hoy, tal vez su más serio competidor. O dicho de otra forma: el único modelo que puede derrotar al Model 3.