Luego de que ayer se confirmara que Argentina superó el millón y medio de casos de coronavirus, continúan las malas noticias. Y es que en medio de la carrera contra reloj por acceder a la vacuna antes de un posible rebrote de COVID-19 en el otoño del año que viene, nuestro país se encuentra entre los diez países con más contagios por coronavirus, desde que hace unos 287 días se registrara el primer caso positivo detectado a nivel local.
Cabe mencionar que, hasta el momento, Argentina acumula un total de 1.503.222 casos positivos detectados. De esa cifra, más de 41.041 personas perdieron la vida, es decir, casi el 3% mientras que el 89% de los infectados logró recuperarse. Peor hay más noticias que resultan alarmantes, y es que más allá de que el pico de nuevos casos diarios informados comenzó a bajar, la baja de infectados confirmados en nuestro país se frenó en los últimos días.
Esto significa que, a pesar de que el oficialismo emita discursos triunfalistas como si se le estuviera ganando a la pandemia, la realidad es que, en los últimos días, hubo una ligera suba en algunos distritos como CABA, y también en Santa Cruz y Río Negro. Aunque en términos epidemiológicos no es posible hablar de brote debido a que se necesitaría un comportamiento similar durante 14 días, como mínimo, la situación debería preocupar.
En ese sentido, se está viendo en algunos distritos, como la Ciudad de Buenos Aires, un estancamiento en la bajada de los casos. Si se excluyen sábados, domingos y feriados, cuando se testea menos, se ve que la curva no baja como hasta ahora. Los especialistas atribuyen este hecho a que existe un mayor relajamiento de la protección personal junto con el menor uso o uso inadecuado del barbijo.
Pero, además, se ha dado el aumento de reuniones sociales en las que no se mantiene distanciamiento, mientras que se observa bares y restaurantes donde no se está respetando la distancia, y la gente se saca el barbijo apenas llega y no solo para comer. Es por ello que los especialistas lamentan que Argentina no tiene un comportamiento lineal con la pandemia y hay una tendencia a flexibilizar rápidamente.
Para colmo, hay que tener en cuenta que el hecho de que Argentina aún se encuentre en el top ten con más casos en el mundo, ese número absoluto no refleja la situación sanitaria de cada país. Y es que la situación empeora en cuanto a la tasa de incidencia, es decir, los contagios detectados en relación a la población, ya que dentro de las 10 naciones con más casos, Argentina ocupa la cuarta posición, con 3.373 positivos por cada 100.000 habitantes.
Y peor si se analiza la tasa de letalidad, que mide la relación entre fallecidos sobre la cantidad de positivos, debido a que Argentina también está cuarta con relación a los otros países del top ten. Por último, en cuanto a la mortalidad, que mide la cantidad de personas que fallecen por COVID-19 por cada millón de habitantes, Argentina se ubica noveno en una lista de 150 países. ¿Con esta realidad el Gobierno puede sentirse victorioso?