Juntos (por el Cambio), pero no tanto. Los apoderados nacionales del partido formalizaron que, para las elecciones primarias, sólo autorizarán a algunas listas por provincia para que se adhieran a la boleta del precandidato a presidente Mauricio Macri. En Tucumán, la nómina aprobada para pegar sus precandidatos a diputados es la que encabeza el subsecretario del Interior de la Nación, Domingo Amaya.
En un documento presentado ante la jueza electoral María Romilda Servini de Cubría, los apoderados Santiago Alberdi (PRO), Mariano Genovesi (UCR) y Juan Manuel López (CC), formalizaron a los “elegidos” para los comicios del 11 de agosto en 23 distritos. La nota detalla que en nuestra provincia se trata de la lista “Unidad por Tucumán” (502 A), que cuenta con el apoyo del diputado radical José Cano. Entonces, según los apoderados nacionales de Juntos por el Cambio, la lista que impulsa el intendente de Yerba Buena Mariano Campero y que lidera Manuel Courel, secretario de Gobierno de esa Municipalidad, tendría que ir con “boleta corta”. Léase, sin candidato presidencial.
Según el apoderado de la lista de Amaya, Martín Mukdise, para poder integrar la “boleta larga” es necesario tener autorización del frente nacional, tal como se establece en el Decreto Reglamentario 443/2011, en su artículo 15 quáter.
Advertidos sobre el oficio, la lista 502 B solicitó el lunes ante el Juzgado Federal N°1 de Daniel Bejas (con competencia electoral) que se apruebe su adhesión a la “boleta larga”. Según argumentó el apoderado Fernando Rossetto, se cumplieron con las presentaciones y los recaudos legales requeridos. Courel anticipó que, de ser necesario, llevarán el caso ante la Cámara Electoral Nacional.
“Me parece un capricho”
Campero consideró que si la boleta de Macri no va en ambas listas, se desnaturaliza el espíritu de las primarias. “Se debe aplicar la ley, que es muy clara. Ley de Democratización se la llama la de las PASO. Tiene como objetivo de que cualquier persona que forme parte de un espacio político pueda participar en iguales condiciones”, analizó el radical en diálogo con LA GACETA.
El intendente remarcó que el frente provincial se adhirió hace tiempo con el nacional. “No es que somos una fuerza distinta, no somos una colectora. Somos una lista dentro del mismo espacio. De hecho, somos precandidatos, como Amaya. A la lista la vamos a conformar entre los dos, sí o sí. Por lo tanto me parece injusto que salga en una lista y en la otra no”, aseveró.
Campero consideró que Bejas debe resolver el planteo cuanto antes, ya que falta un mes para los comicios. Además, se despachó con críticas hacia la otra lista. “Me parece un capricho de la otra parte, que quiere sacar una ventaja innecesaria en una interna”, lanzó. Y agregó: “hemos demostrado con hechos y acciones que mostramos al Presidente los cuatro años, que no escondemos la foto y aparecemos los últimos 15 días. En la última elección ha quedado claro que jugamos en lo colectivo. Vamos a trabajar para que Macri saque la mayor cantidad de votos y gane el municipio y la provincia”.
Fallo en Santa Fe
La mesa nacional de Juntos por el Cambio autorizó que en algunas provincias, como en Corrientes, Misiones, Santa Cruz y Formosa, varias listas vayan pegadas a la boleta Macri-Pichetto. En otras, como en Tucumán, Córdoba, Jujuy, Río Negro, Entre Ríos, Mendoza y Santa Fe vaya sólo en una.
En esta última provincia, sin embargo, hubo una modificación. La Justicia Electoral autorizó ayer a una segunda lista a pegar su boleta con la de la fórmula Macri-Pichetto.
El conflicto se había iniciado el día en que venció el plazo para la presentación de precandidaturas. La UCR armó entonces una nómina para enfrentar en la interna a otro sector de Cambiemos. La disputa se trasladó a la junta electoral de la alianza, la cual sólo habilitó la boleta encabezada por Federico Angelini, presidente del PRO.
La conducción del otro socio de la coalición oficialista concluyó que ir con “boleta corta” le restaría posibilidades e hizo el reclamo.
El juez federal Reinaldo Rodríguez revocó la decisión de las autoridades partidarias y ordenó que se oficialice el modelo de boleta que llevará la cara del ex concejal rosarino Martín Rosúa junto a la de Mauricio Macri.
Análisis
Ironías del castigo al rebelde
Por Juan Manuel Asis – LA GACETA
La polémica decisión de la junta electoral nacional de Juntos por el Cambio de negarle a Courel que lleve en su boleta a la dupla Macri-Pichetto, de mínima, es una medida política cuestionable, cuya legalidad resolverá la Justicia Electoral Federal. Y más allá de lo curioso que significa que se rechace que afiliados de partidos del frente se postulen en la propia interna abierta, este castigo al “rebelde” Mariano Campero desnuda ironías electorales en función de varias hipótesis:
1- si la lista de Courel se impone y “borra” del mapa electoral a la de Amaya, Macri no tendría candidatos a diputados en Tucumán.
2- si se verifica un “empate” y un reparto de puestos en la lista entre Amaya y de Courel, la boleta se integraría con candidatos a diputados que sí tienen un postulante a presidente y otros que no. Rarezas si las hay.
3- las PASO son internas abiertas para que el independiente pueda elegir candidatos de los partidos que prefiera para que lleguen a la general, pero la de la alianza macrista no podía ser más cerrada. Directamente digitó. Ironías que devienen de una sanción política.
