Tras su relanzamiento limitado a 3 y 6 cuotas fijas, “Cuota Simple” no logró mantener el atractivo que tuvo en sus inicios. En un contexto de leve mejora en el consumo, el Gobierno nacional optó por no renovar el programa. Además apostará a que las promociones y opciones de financiamiento bancarias sean el motor del gasto.
Para aprovechar el debilitamiento de “Cuota Simple”, los bancos intensificaron sus ofertas, desde el reciente Hot Sale hasta promociones especiales con cuotas sin interés y reintegros. Esta estrategia logró un aumento en el volumen de compras, incluso sin el respaldo del programa oficial.
“Hoy tienen más peso las promociones de los bancos, y eso va a seguir impulsando el consumo con tarjetas”, afirmó Salvador Femenía, vocero de CAME. También destacó el rol creciente de las entidades financieras y los comercios en el sostenimiento del gasto.
El consumo se reactiva, pero la financiación es clave
Las ventas minoristas muestran una mejora, al acumular un crecimiento del 14,9% en el primer cuatrimestre. Sin embargo, el bajo poder adquisitivo y los salarios limitados hacen que la financiación y las ofertas sigan siendo cruciales para la actividad comercial.
Durante el primer trimestre, las promociones bancarias y las tasas preferenciales impulsaron el consumo en cuotas, especialmente en planes de 6 y 3 pagos. Paralelamente, los bancos cerraron acuerdos directos con comercios para ofrecer condiciones más competitivas y descuentos exclusivos.
Tarjetas de crédito al alza
Un informe de First Capital Group revela que las operaciones con tarjetas de crédito en pesos crecieron un 7,1% mensual en abril y alcanzaron un saldo total de $18,7 billones.
“El dinamismo en el consumo con tarjetas de crédito refleja el impacto de la inflación, incentivando el uso de cuotas como herramienta de financiamiento. No obstante, este rubro crece a un ritmo menor que los préstamos personales”, explicó Guillermo Barbero, socio de First Capital Group.
La salida de escena de “Cuota Simple” marcará una nueva etapa en el financiamiento al consumo, donde los bancos toman la iniciativa con estrategias comerciales más agresivas y adaptadas a las necesidades de los consumidores.