Boleto Gratuito

Alberto está absolutamente solo luchando con sus fantasmas

Él y solo él tiene la llave para destrabar la anomia en la que está atrapado.

alberto fernandezwebp
Alberto Fernández (Archivo)
Descacharreo

Dicen que tiene un cierto grado de comprensión de la realidad pero que eso no significa que vaya a reaccionar en tiempo y forma. Alberto Fernández sabe que esta vez vienen por todo, pero a la vez cree tener más tiempo y crédito por delante del que en realidad dispone. Sus interlocutores lo reconocen ubicado en tiempo y espacio y con plena conciencia de la gravedad del momento, pero aguardan impacientes una reacción que no termina de llegar.

Alberto Fernández arde de ira, pero no atina a reaccionar. Eso dicen los que lo frecuentan. De hecho, luego de mandar al frente a varios de los suyos, con declaraciones autodefensivas en algo que llegó a entender como un abroquelamiento frente a la embestida del kirchnerismo, este miércoles, desde el Ejecutivo volvieron a aplicar paños fríos. Está atrapado en un fuego cruzado.

Fumigación y Limpieza

Desde el frente K apuestan a minar su integridad y autoestima. Ya no se trata sólo de sostener el relato, de preservar el capital simbólico, para tomar el control de los ministerios clave. Quieren llevarse puestos a “los funcionarios que no funcionan”. Pretenden evitar que ejecuten medidas impopulares que hagan imposible sostener la narrativa. Necesitan controlar la economía.

Movilidad Urbana

Martín Guzmán está en el ojo del huracán. Alberto resiste entregarlo. La discusión sobre el incremento de las tarifas eléctricas es probablemente el más urgente y sensible con el que le tocará lidiar. No la tiene fácil. La Secretaría de Energía está en manos de funcionarios del cristinismo que resisten las órdenes y optan por desacatar. No son pocos los que le piden que de manera urgente que aplique correctivos.

O que tome el control de la situación separando a La Cámpora y el Instituto Patria de los cargos clave. Que reformule el Gabinete, pero con tropa propia. Que la corte de una buena y santa vez con Cristina Kirchner y haga la suya. Dentro del espacio Albertista están los que creen que aún hay espacio para una “tregua de gobernabilidad consensuada”. Y los que, por oposición, sostienen que no hay margen para consenso alguno. Para estos últimos el consenso es rendición.

Máximo Kirchner le ha dicho a Alberto Fernández que en ningún caso puede hacer lugar a lo acordado con el FMI por “una cuestión de piel”. Fin de la conversación. Cristina Kirchner no solo quiere inmunidad judicial para ella y los suyos, también apunta a retener poder para Máximo Kirchner, en el enclave del conurbano bonaerense. “Las desigualdades son productos de decisiones políticas o de falta de decisiones políticas”.

Banner Tucumán Despierta
Banner Tucumán Despierta

Vale la pena detenerse en esta frase de CFK en el discurso de esta semana. A confesión de parte relevo de prueba. Con 14 años de kirchnerismo en el poder en lo que va del nuevo milenio nadie puede hacerse el desentendido. “Tener poder es tener impunidad”, sostenía Alfredo Yabrán en los lejanos 90. Es por ello que puede ser que Cristina Kirchner esté comprendiendo que esta vez, a ella también, el poder se le está yendo inexorablemente de las manos.

Alberto Fernández habla con muchos, pero está solo, absolutamente solo, lidiando con sus fantasmas. Él y solo él tiene la llave para destrabar la anomia en la que está atrapado. A algunos de los suyos les aseguró que habrá novedades después del Domingo de Pascuas. A otros les anunció un relanzamiento de su Gobierno en la Semana de Mayo. Nadie sabe exactamente qué está pasando, ni qué pasará.

Dejanos tu Comentario