El presidente Alberto Fernández aseguró hoy que su gobierno también “es el gobierno de Cristina (Kirchner)” y reconoció que durante su gestión buscó sin éxito cerrar la grieta en la Argentina.
En un extenso reportaje con el periodista Jorge Fontevecchia, publicado en la edición impresa del diario Perfil, el Jefe de Estado hizo referencia a la relación que mantiene con la vicepresidenta, aseguró que la Corte es “servil a la oposición”, volvió a defender a las PASO, señaló que no le teme a la competencia interna en el Frente de Todos y ratificó sus críticas a Mauricio Macri y los dirigentes de Juntos por el Cambio.
Sus principales definiciones:
La grieta política: “Hice todo lo que pude y tal vez he hecho cosas mal, pero siempre quise terminar con esa grieta y no pude, no salió. Pero lo que creo es que en esa grieta también quienes siembran desaliento han sido muy eficaces. Son los mismos que también trabajaron en estigmatizar a Cristina, en un lugar que Cristina no merece”.
Iniciativa para derogar las PASO: “Las PASO son una ley y hay que respetarla, parte de la democracia es respetar las normas electorales. En las próximas elecciones, las de 2023, desde el último concejal hasta el Presidente, deben someterse al veredicto popular, en primarias obligatorias y que cuanto más fuerte sea ese debate mejor. Cuanto más podamos tener en claro aportando ideas al debate, mejor. No le tengo miedo al debate, le tengo miedo al silencio”.
Sobre la competencia interna dentro del Frente de Todos: “No tengo ningún problema de competir con cualquiera. Mi preocupación no es competir dentro del Frente. (…) Sería bueno que se abriera un debate. El tiempo más rico que vivió el peronismo fue el debate Menem-Cafiero, aún cuando los que éramos cafieristas lo hayamos perdido. Fue el debate más rico que se dio. Lo que creo es que necesitamos darle fortaleza al Frente y esa fortaleza se logra con el debate. Después los actores del debate no sé quiénes van a ser. Lo que sí sé es que el debate vale la pena”.
El presidente Alberto Fernández hizo un balance de su gestión, a 3 años de su asunción
“Este gobierno, del que yo soy presidente, es también el gobierno de Cristina.Si este gobierno no tiene hechos de corrupción, en este gobierno también está Cristina. Y Cristina nunca obstaculizó esta decisión mía de actuar de esta manera. Nunca. Y nunca tuvo la más mínima expresión por favorecer o beneficiar a alguien. Nunca. Pongamos el valor de la honestidad, lo pone usted, de este gobierno, también en cabeza de Cristina”.
Sobre la designación trunca de Daniel Rafecas como Procurador General: “No he mandado otra opción porque creo que es el mejor hombre para que sea procurador en una república y en una justicia independiente. Nadie me supo explicar por qué no lo tratamos. Nunca me dieron una definición clara de qué era lo que impedía que fuera el procurador”.
Críticas a la Corte Suprema: “La corte es absolutamente servil a la oposición”.
“Escucho amigos, militantes, compañeros que me dicen: “Lo que tenés que hacer es intervenir la Justicia”, ¿y cómo se interviene la Justicia en una República? Necesitamos una ley. ¿Tenemos la posibilidad de sacar esa ley? La respuesta es no. “Entonces hagámosles juicio político a los miembros de la Corte”, necesitamos dos terceras partes del Congreso para hacer eso. La verdad es que la Corte debería darse cuenta del desprestigio en el que ha caído. Debería darse cuenta de lo que ha hecho”.
“Estamos en un punto donde tenemos que tomar conciencia de la degradación que la Justicia tiene. La gente piensa que cuando digo estas cosas estoy pensando en Cristina. No estoy pensando en Cristina, en todo caso es una víctima más de este sistema judicial, pero hay millones de víctimas”.
Sobre Sergio Massa: “Es una persona competitiva, de su generación es el que más se preparó para conocer el Estado y la sociedad le va a valorar el compromiso que tuvo”.
Unificación del mercado cambiario: “Estamos trabajando para que el mercado cambiario se unifique”.
“Deberíamos tener un mercado de cambios único. Cuando Néstor fue presidente teníamos un mercado de dólares único, y Cristina durante toda su gestión tuvo un mercado de dólares único. Lo que pasa es que, insisto, recibimos un Banco Central sin dólares. Entre mi llegada, desde que gané la elección hasta que asumí como presidente, se fueron 25 mil millones de dólares de la Argentina. En ese contexto nos agarró la pandemia. La reconstrucción de las reservas cuesta mucho”.
“La carencia de dólares es un problema, y que nuestro deber es buscar la forma en que los dólares se destinen precisamente a eso”.
Los argentinos y la falta de dólares: “Ayuda mucho que los argentinos entiendan que los dólares los necesitamos para traer insumos seguir aumentando la producción, antes que para el placer, la distracción y el ahorro”.