Al respecto, los especialistas en alergia e inmunología puntualizan que las patologías más recurrentes en estos meses son la rinitis y rinoconjuntivitis alérgica, debido a la sequía que hay en el ambiente y a la contaminación atmosférica producida por prácticas como la quema de pastizales, basura o caña. Además durante agosto y septiembre inicia la polinización de árboles primaverales, lo cual intensifica aún más los síntomas alérgicos. Si bien dentro de los orígenes de la rinitis hay muchas causas posibles, el 40 por ciento de ellas son alérgicas y la predisposición a desarrollar alguna de las patologías de alergia suele ser hereditaria.
Todos estos factores se superponen y generaron hace ya varios años un crecimiento exponencial de la consulta con especialistas por dicha problemática. Así también está demostrado que, cuando la persona ya se sabe alérgica, empieza con anticipación a tomar los recaudos en busca de la prevención de los síntomas que suelen resultar muy molestos e influir negativamente en el desarrollo de las actividades cotidianas como el trabajo, la escuela y en el hogar y por ende en la calidad de vida del paciente.
Evitar la exposición al alérgeno es clave en estos casos. Usar lentes de sol para prevenir molestias oculares, viajar con ventanillas cerradas, ventilar los ambientes en horarios adecuados -ni en las primeras horas de la mañana, ni en las últimas horas de la tarde, porque es donde más concentraciones de polen hay-, usar aspiradora en lugar de barrer y trapo húmedo y agua para limpiar el polvillo en lugar de plumero.
Cabe destacar que, si bien pueden hacerse tratamientos sintomáticos e incluso algunos preventivos a través del uso de spray nasal y antihistamínicos, es importante testear al paciente y ver la causa específica de alergia para poder tratarlo oportunamente; así como es fundamental descartar otro tipo de enfermedades, especialmente en tiempo de pandemia.
En este contexto estas son algunas recomendaciones para lograr un entorno saludable en el dormitorio, lugar delm hogar donde suelen acumularse varios factores desencadenantes de crisis alérgicas:
- Se recomienda el cambio y lavado de la ropa de cama una o dos veces por semana, con el agua a 60 °C.
- El lavado de peluches y pijamas debe realizarse de manera periódica.
- Se debe tener la menor cantidad de peluches u objetos que puedan acumular polvo: Se recomienda guardarlos en cajones, gabinetes cerrados o en bolsas. Si hay niños muy pequeños en la casa, se pueden dejar uno o dos, que se lavarán también con agua caliente y se secarán al sol.
- Lo ideal es tener superficies lisas en el ambiente (por ejemplo, pisos flotantes), ya que son más fáciles de limpiar.
- Cuantos menos adornos, mejor. Evitar colocar libros y revistas en bibliotecas en este ambiente de la casa.
Sobre la ropa de cama
- Se recomienda que la ropa de cama sea, en lo posible, 100% de algodón y sin blanquear (es decir, sin tratamiento), para evitar la irritación de la piel.
- Los acolchados, edredones y cobertores deben lavarse cada cuatro o seis meses.
- Se recomienda el uso de fundas antiácaros para el colchón y sustituir las mantas por un edredón que pueda enfundarse.
- En ningún caso se recomienda el uso de naftalinas ni antipolillas, ya que estos productos desprenden compuestos químicos que son irritantes y que pueden empeorar el proceso alérgico.
Tips para mejorar la calidad de vida de quienes padecen alergias:
- Ventilar los ambientes es fundamental a la hora de eliminar los ácaros.
- Evitar el cigarrillo en ambientes cerrados alivia no sólo la sintomatología relacionada con la alergia, sino que ayuda a prevenir enfermedades pulmonares, cardiovasculares y metabólicas, entre otras.
Ministerio de Salud Pública Tucumán