El Gobierno confirmó este miércoles que busca un “consenso técnico” para combinar vacunas ante la falta de segundas dosis de la Sputnik V y el peligro que representa el posible avance de la variante Delta de coronavirus en la Argentina.
“Es una posibilidad (el intercambio de vacunas) que se evalúa desde el primer momento por la dificultad en el acceso, pero lo estamos evaluando”, lanzó la ministra de Salud de la Nación Carla Vizzotti en diálogo con Radio Metro. Fue en respuesta a una consulta vinculada a las dificultades del país para acceder al componente “2″ de la Sputnik V.
Sin embargo aclaró que la combinación de vacunas, es decir, una dosis de Sputnik V junto con otra de AstraZeneca, solo se dará en caso de que los estudios científicos demuestren seguridad y eficacia. La investigación ya se desarrolla en otras naciones.
“Si se da el consenso técnico con otros países, lo charlaremos con los diferentes distritos y lo estaremos viendo. Los países recomendaron que preferentemente se dé la misma marca, pero lo importante es terminar con los esquemas de vacunación y son varios países de Europa los que están intercambiando plataformas de vacunas”, detalló.
Preocupación oficial por la escasez de segundas dosis de Sputnik V
La falta de segundas dosis de la vacuna rusa es una de las cuestiones que más preocupa al Gobierno. Desde el inicio de la campaña de vacunación, la Argentina recibió 7.875.585 dosis Sputnik V del componente 1, mientras que solo 1.540.160 del 2, es decir, hay un espectro de 6.335.425 personas que deben completar su esquema de inoculación. Claro está, no todos deben hacerlo con urgencia, ya que existe una ventana de 90 días entre la primera y segunda aplicación.
Tal como adelantó TN en diversos artículos, los retrasos en el envío de segundas dosis por parte del Instituto Gamaleya se centran en la dificultad de producción de esta vacuna: es que la fermentación del componente 2 es mucho más compleja que la del primero.
Por estas horas el Gobierno nacional espera que Rusia confirme la disponibilidad de un nuevo lote de vacunas. Hasta el momento ese país le envió a la Argentina 9.415.745 sueros rusos, es decir, un tercio del total comprometido. El Ministerio de Salud de la Nación acordó un contrato por 20 millones de dosis, a las que luego se le sumaron 10.000.000.
Buena parte de estas dosis serán entregadas por el laboratorio Richmond, propiedad de Marcelo Figueiras. Esta firma llegó a un acuerdo con el Instituto Gamaleya para envasar las dosis de Sputnik V. En una primera etapa la empresa nacional envasará componentes 1, como los casi 450 mil frascos que ya se enviaron a Rusia para su control de calidad. Aunque también se realizará ese mismo procedimiento con las dosis dos, pero hasta el momento la Federación Rusa no envió los principios activos.