La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) informó que después de una investigación exhaustiva se detectó una evasión estimada en $354 millones, que se habría hecho a través de subdeclaraciones del impuesto sobre los Ingresos Brutos entre el período 2016-2019. La entidad recaudatoria decidió intimar a 10.000 productores y arrendatarios que explican el 50% del total de la producción rural bonaerense y que podrían estar involucrados en la maniobra.
Según señaló el titular de ARBA, Cristian Girard, la acción fraudulenta habría quedado al descubierto tras el “cruce de datos con imágenes satelitales e información del régimen de control y fiscal agropecuario” que les permitió detectar “serias” inconsistencias en las declaraciones juradas durante esos cuatro años. También trascendió que, por ejemplo, en campos donde había hasta ocho silos de almacenamiento de granos solo era declarado uno.
“La fiscalización determinó que hubo una significativa subdeclaración de ingresos en transacciones vinculadas a la producción de granos y los arrendamientos rurales. Las maniobras de evasión involucran a más de 10.000 contribuyentes de varios distritos de la zona núcleo del campo bonaerense, que ahora están siendo intimados”, dijo Girard en un comunicado.
Luego de realizar una serie de análisis de imágenes satelitales que permiten identificar el tipo de cultivo y superficie cosechada, señaló la entidad, se encontraron con las irregularidades que surgen del Índice Verde que elabora la agencia de recaudación. “Sobre esos valores y en función de otras variables y parámetros, se aplica un rinde promedio que posibilita calcular el nivel de ingresos tanto por cultivo de granos como por arrendamiento de inmuebles rurales”, explicaron. Así, se habrían encontrado con casos de inconsistencias derivados de la falta de presentación de declaraciones juradas o informar ingresos menores a los realmente obtenidos.
El descargo del agro
Horacio Salaverri, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), dijo que desde la entidad ya se está trabajando con las rurales locales para saber a qué productores estaban llegando las notificaciones, aunque aseguró que todavía no tenían noticias. Por otro lado, cuestionó la eficiencia de las imágenes satelitales en este caso, dado que las zonas verdes implantadas muchas veces son producidas por otras personas que no necesariamente son los dueños de los campos o que, en algunos casos, podrían estar afectadas por inundaciones o sequías.
“Hemos consultado a las rurales y ninguna tiene información de productores a los que les hayan llegado las intimaciones, hay que ver en qué características se basan estas intimaciones. Se habla de las declaraciones, de determinados índices, pero nosotros siempre tenemos algún tipo de observación cuando se hacen las declaraciones. La utilización del Índice Verde ya causó inconvenientes porque no es del todo veraz”, indicó el presidente de Carbap.
Horacio Salaverri, presidente de CARBAP.
Según extendió, el análisis se estaría haciendo a partir de imágenes satelitales donde se ven parcelas sembradas o determinados rendimientos, pero no se entiende que hay casos de sequía o la presencia abundante de agua y también la pérdida de pasturas. “Como se van tomando a lo largo del tiempo no se puede ver si hay agua o si está encharcado y no se puede trabajar. Hay una cantidad de cuestiones desde ese punto de vista. Es complejo determinar a partir de las imágenes satelitales el nivel de evasión que dicen, si se hace eso hay que ver del todo estimaciones o si ese índice utilizado tiene la certeza de que hay una evasión fiscal en el medio”, puntualizó.
El dirigente también sostuvo que si hay una cuestión tributaria por cumplir de parte del productor se va a determinar y enseguida se procederá. “Todavía no hay notificaciones hacia los productores y hay que ver en qué consisten porque tienen que tener veracidad”, dijo y acotó que, muchas veces, sucede que en algún distrito se presentan lluvias y en otro no, por lo que esto también puede cambiar la capacidad de rinde promedio por hectárea por zona.
De acuerdo con los datos que maneja Carbap, hay 300 mil partidas de impuesto inmobiliario en la provincia de Buenos Aires, y una buena cantidad de productores que supera en gran medida el número señalado por ARBA, pero destacan que los acusados de evasión fiscal siguen siendo “un número alto”.
“Creemos que puede haber un error, que hay algún tipo de utilización del índice que no puede ser exacto. Puede haber menos hectáreas declaradas por terceros o titulares, hay una cantidad de variantes y esto no significa una evasión, a veces, son errores nominales de quienes producen la parcela. Suele pasar que el campo es propiedad de alguna persona y lo declara otra que está utilizando la partida”, precisó y descartó que se trate de una cuestión política.