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ARIEL GARCIA: Mariano Campero es un OPORTUNISTA

El director ejecutivo de la Organización para el Desarrollo Sustentable, cuestionó la “alianza” entre el intendente radical y Bussi

Ariel García Mariano Campero
Descacharreo

La intención de Mariano Campero de aliarse con Ricardo Bussi es parte de lo que podría considerarse un macrismo tardío, en el sentido de que lo que hace el intendente de Yerba Buena no es ni más ni menos que oportunismo político. Debido a que se le termina su último mandato como intendente, por lo que no está preocupado en cómo resolver los problemas a los vecinos de Yerba Buena, todavía le quedan tres largos años de mandato.

Pero tampoco está preocupado en abordar los grandes problemas que tiene la provincia, como el aumento de la pobreza, la falta de educación para los chicos o mejorar el sistema de salud. En ese sentido, la pandemia dejó en evidencia el hecho de que cómo es posible que el municipio no cuente con un hospital. Esto significa que, llegado el caso de que un vecino de Yerba Buena tuviera una emergencia, no puede ser internado porque no existe una sala de terapia para hacerlo.

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Que una ciudad como la de Yerba Buena, que cuenta con una recaudación propia muy importante, no tenga un hospital público propio es una vergüenza y una inmoralidad. Pero resulta que Mariano Campero no está preocupado por eso, sino por su propio futuro político. En este marco es que se explica esta suerte de fantasía electoral, que parece ser la alianza que intenta tejer el intendente de Yerba Buena con el legislador provincial Ricardo Bussi.

En ese sentido, la intención del mandatario municipal se parece más a una intentona o un manotazo de ahogado porque ve que se acaba su gestión y que no tiene forma de ser reelecto en el cargo. Lo que tendría que hacer es reflexionar y ponerse a trabajar pensando en la gente. En ese sentido, la propuesta de Mariano Campero de tejer una alianza con Ricardo Bussi, es algo que atrasa, en el sentido de que habla de la intención de aliarse con el pasado más oscuro y tenebroso de Tucumán.

SEPARA

Todo esto no es más que parte de la fantasía y de la ambición personal de alguien que no está a la altura de las circunstancias, ni de las demandas de los vecinos de Yerba Buena. Y es que independientemente del lugar de la ciudad de Yerba Buena que uno elija para recorrer, es notorio el abandono y descuido a los que está sometida. En ese sentido, hay que reconocer el enorme trabajo que hacen los comerciantes y empresarios de la Ciudad Jardín.

Y es que ellos desarrollan su actividad, sin tener el acompañamiento del gobierno municipal de Yerba Buena. En ese marco, lo único que hace la administración de Mariano Campero es aumentar impuestos y ver la manera de cómo recaudar más. En definitiva, el mandatario municipal forma parte de ese macrismo que demostró ineficiencia para gobernar. Al fin y al cabo, la administración de Campero no es más que un cúmulo de frases marketineras.

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Sin embargo, el intendente de Yerba Buena tendrá que tener en cuenta, que cuando la gente vaya a votar, tendrá presente quiénes son los dirigentes y los políticos, sean gobernantes o no, que estuvieron ausentes frente a estos momentos tan difíciles que les toca atravesar a las personas en Tucumán. Mariano Campero se debería dedicar a solucionarle los problemas a la gente en lugar de inventar alquimias electorales tan sólo con la intención de ocupar un cargo, concluyó Ariel García.

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