Atlético tenía una gran oportunidad de extender su buen momento en la Liga Profesional, visitando a un Independiente sumido en una crisis institucional sin precedentes, que influyó negativamente en su rendimiento futbolístico y de entrada se mostró dispuesto a no desaprovecharla.
Antes de que transcurriera un minuto desde que el árbitro Fernando Echenique marcara el arranque del partido, a puertas cerradas en el estadio de Platense, Augusto Lotti marcó la ventaja tras una buena corrida de Ramiro Ruiz Rodríguez, que agarró mal parada a la defensa del Rojo.
Gol de Atlético: ventaja desde el arranque
A los 25′ el juez le mostró la roja a Barreto por una pierna levantada que pareció impactar en el rostro de un rival, pero el VAR lo hizo cambiar el fallo al mostrar que el contacto no existió, tras lo cual el central de Independiente se convirtió en el primer amonestado de un partido que siguió once contra once.
Jugada polémica: la expulsión que no fue
Segundo tiempo
En el arranque del complemento, Independiente salió decidido a volcar el juego en campo visitante y tuvo un par de ocasiones, pero siempre sin puntería ni pericia para empatar un partido que Atlético siguió aguantando cerca de su arco y pensando en la contra.
Así a los 5′, Ruiz Rodríguez, aprovechando siempre su velocidad, se fabricó un mano a mano con el arquero local, pero Sosa le ganó la pulseada dejando a su equipo a tiro del empate
Con el correr de los minutos, Independiente fue acentuando su dominio territorial y del balón, mientras los contragolpes de Atlético se hacían más esporádicos, pero no pudo plasmar ese dominio en la red.
Sobre el final, con el local totalmente volcado al ataque, los de Pusineri pasaron algunos sofocones pero supieron aguantar a pie firme para terminar alargando la paternidad ante este Independiente que no encuentra ni el bálsamo de un buen resultado para exorcizar la debacle institucional que arrastra hace meses.