La causa de explotación sexual de menores por parte de un empresario tucumano que residía en Estados Unidos tuvo un importante avance. El juez federal José Manuel Díaz Vélez dictó la falta de mérito de un acusado y el sobreseimiento de otro que ya había sido dictada por el juez Daniel Bejas. El fiscal federal Agustín Chit ya apeló la resolución.
Una mujer realizó una denuncia asegurando que un hombre podría haber montado una organización para prostituir a varias jóvenes, entre las que se encontraba su hija. Informó además que el sospechoso, mayor de edad, era un hombre de negocios tucumano que residía en Miami. Declaró también que el hombre le pagaba en dólares a ella y a las otras jovencitas para que mantuvieran relaciones con él y otras personas. en el hotel Sheraton.
Eduardo Made (67) fue detenido en mayo de 2022 por este caso, pero el fiscal siguió avanzando con la investigación. Al sumar indicios de que habrían colaborado con el imputado, pidió que también se procesara al gerente del hotel Marcos Gual y del encargado Walter Salinas.
El investigador sostuvo que “los nombrados valiéndose de sus roles jerárquicos del hotel Sheraton de esta provincia, propiciaron las condiciones para que Made pueda llevar adelante sus maniobras de captación, acogimiento y explotación sexual de víctimas”. Ambos señalados reconocieron conocer al principal sospechoso por sus estadías en el hotel, pero negaron haber tenido alguna participación en la conducta reprochada al principal acusado.
“La conducta ilícita, no podía llevarse a cabo sin el aporte activo, es decir, la complicidad de dos personas con funciones específicas: el gerente del Hotel (Gual), por quien pasa el contralor de lo que sucede en el lugar, como así también del encargado del área de seguridad (Salinas), que a la vez también es responsable del monitoreo de las cámaras instaladas”, sostuvieron los abogados de la Fundación María de los Ángeles Verón que actúan como querellantes en el expediente.
Los defensores Javier Lobo Aragón (Gual) y Aníbal Paz (Salinas) presentaron ante el juez Bejas un planteo para que fueran despegados de la causa, ya que consideraron que no había las pruebas suficientes para acusarlos. También fundamentaron que a lo largo de dos años los acusadores no pudieron reunir más evidencias, por lo que correspondía que se aceptara su pedido. El magistrado sobreseyó a Gual y dictó la falta de mérito a Salinas. Made, en tanto, sigue detenido bajo la modalidad de arresto domiciliario.