Mientras en Boca analizan la posibilidad de presentar una protesta formal ante la Conmebol por lo sucedido el martes en la Bombonera contra Atlético Mineiro, por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores de América, partido en cual hubo un gol mal anulado a Diego González a instancias del VAR a raíz de una infracción inexistente, en el seno de la Comisión de Árbitros de la Confederación tomaron una determinación que oficia como testimonio elocuente de lo ocurrido: suspender al árbitro del partido y al encargado del VAR.
Se trata del colombiano Andrés Rojas Noguera, árbitro principal, y quien probablemente tenga mayor responsabilidad en el error más grosero de todos los que se cometieron en la noche del martes, el paraguayo Derlis López, a cargo del VAR.
López estaba designado para repetir tarea y hacerse cargo del VAR del partido de este miércoles entre Defensa y Justicia y Flamengo, pero lo bajaron como consecuencia de lo acontecido en la Bombonera.
Por su parte, en Boca esta vez estarán más alertas sobre la designación del juez para la revancha. No quieren otro árbitro como el colombiano Andrés Rojas, que ellos consideran que cedió ante la presión del Mineiro, con Nacho Fernández a la cabeza, y que terminó anulando un gol que él mismo, en las palabras, había confirmado.
Por eso, será un punto que también jugará en esta historia, tanto como el juez de VAR. De hecho, en su malestar, Boca también tienen en cuenta el caso del paraguayo Derlis López, que este martes invitó a Rojas a revisar una falta casi imperceptible, cuando días atrás, por Copa América, no había convocado al juez Tobar ante una mano de Thiago Silva, en Brasil-Perú: “Todo normal”, dijo en ese momento.