Es cada vez más grande el nivel de incertidumbre que hay en el mundo agropecuario, como consecuencia de la falta de una política hacia el sector y por la crisis económica que atraviesa la Argentina. Todo esto quedó reflejado en la última encuesta que realizó el Movimiento CREA, a 1.119 empresas del agro, que de manera cuatrimestral permite conocer la opinión de cada uno de ellos.
En relación a la marcha del país, el 66% consideró que la situación de la Argentina estará peor dentro de un año, registrando un aumento de ocho puntos en relación al nivel alcanzado en la encuesta de marzo pasado. Por otro lado, un 42% de los consultados proyectó que su empresa podría estar en una situación más desfavorable dentro de un año, cuando en el último relevamiento esa cifra fue del 34%, reflejando una importante caída de la proporción de empresarios que consideran adecuado el momento de realizar inversiones.
Al momento de analizar las expectativas por actividad productiva, la encuesta mostró que los empresarios ganaderos proyectan en su mayor parte que los resultados del próximo ejercicio se van a deteriorar, donde la actividad no atraviesa por un buen momento como consecuencia de la intervención del Gobierno de Alberto Fernández en la cadena de ganados y carnes. Por el lado del negocio agrícola, casi la mitad de los consultados estimó que los resultados del próximo ciclo serían inferiores a los de la última campaña, y en la lechería se modera esa situación por la reciente recuperación de los precios.
Negocio agrícola
En momentos donde se intensifica la siembra de los cultivos de invierno y se proyecta la de granos gruesos de la campaña 2021/2022, la encuesta de CREA señaló que la mayor parte de las empresas mantendrá una elevada proporción de gramíneas en la rotación, algo que es clave para la sustentabilidad del sistema productivo. Otro aspecto que mostró la encuesta oara tener en cuenta será la evolución del clima: “En un año que se proyecta desafiante, será un factor decisivo a la hora de decidir el plan de siembra y la posterior producción”, señalaron desde CREA.
Además, el cultivo de trigo tendrá una participación del 15% en ese proceso de rotación, contra el 16,4% de la campaña pasada, y la proporción total de cultivos de invierno llegaría al 21,5%, versus el 22% pasado. Por el lado del maíz, el cereal temprano más tardío tiene una proyección del 32%, alcanzando aumento interanual del 15% para el maíz temprano, mientras que la proporción de tardío se mantendría estable respecto del ciclo anterior.
Negocio ganadero
En momentos donde el negocio ganadero atraviesa un momento de muchas dificultades por los efectos de las restricciones a las exportaciones de carne vacuna, un 47% de los 700 ganaderos consultados planea mantener el nivel de retención de cría, mientras que otro 41% proyecta incrementarlo en el próximo ejercicio. “De todas maneras, las intenciones de incrementar los niveles de retención en cría se vienen desacelerando en los últimos años, dado que en julio de 2018, de 2019 y de 2020 eran de 52%, 47% y 48% respectivamente”, expresaron los integrantes de la entidad que agrupa a los empresarios.
El dato más relevante en relación a la ganadería, es que un 17,8% de los empresarios ganaderos señaló que planea pasar parte de la superficie dedicada a ganadería en 2020/21 hacia la agricultura en la campaña 2021/22. Se trata del registro más elevado de la serie histórica de la encuesta SEA de CREA, lo que podría estar indicando el inicio de un proceso de desinversión en la actividad.
Por el lado del porcentaje de destete promedio obtenido en el ejercicio 2020/21, el mismo se ubicó entre 67% y 88%, dependiendo de la zona, donde todas las regiones CREA, a excepción del Oeste Arenoso, registraron aumentos en la cantidad de terneros destetados respecto del promedio histórico zonal. Según se detalló, los mayores incrementos se registraron en Litoral Norte y Litoral Sur.
Y por último, con respecto a la lechería, el 72% de los 157 empresarios tamberos consultados manifestó que espera aumentar la producción total en un promedio del 5,5% durante el próximo año, mientras que esa proyección para los próximos cuatro meses es del 4,9%. La mayor parte del crecimiento programado está sustentado en un aumento de las vacas en ordeñe, fundamentalmente a través del rodeo propio.
