Decenas de manifestantes del Polo Obrero, todos con tapabocas, con guantes y con carteles, se reunieron antes del mediodía en los alrededores del Obelisco para marchar desde allí hacia el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, con una serie de reclamos en medio de la pandemia de coronavirus.
Si bien intentan mantener el distanciamiento social ordenado por el Gobierno, según imágenes televisivas las personas llegaron juntas en colectivos a la zona. Entre otras cuestiones, piden a las autoridades agua potable para los barrios vulnerables de la Ciudad y el país. Hace dos semanas la agrupación había llamado a una protesta pero se había cancelado por la crisis sanitaria.
Se espera que la concentración se replique en varias ciudades del país. Fue convocada bajo la consigna: “Con hambre no hay cuarentena” y en pedido de mayor asistencia alimentaria a los sectores más necesitados.
Sobre la manifestación, Néstor Pitrola, dirigente nacional del Partido Obrero en el Frente de Izquierda, habló en redes sociales para mostrar su apoyo. “El Polo Obrero, mediante pequeñas manifestaciones con distanciamiento y barbijos, reclama en todo el país por alimentos que siguen sin llegar ante una situación desesperante en los comedores abarrotados de gente”, escribió y agregó: “Ahora mismo en el Obelisco. Denunciamos detenciones en el Chaco”.
Tras su mensaje, Pitrola habló con el canal de noticias y destacó que en la marcha se respetan todos los controles y las recomendaciones sanitarias. Además insistió en que desde hace 25 días no llegan alimentos a los comedores. Respecto de los riesgos a la salud de los manifestantes, dijo que no cree que estén en riesgo: “Mantienen la distancia y tienen barbijos, la necesidad no espera. La gente que no puede comer no aguanta más”.
La marcha de hoy fue anunciado con un comunicado que asegura que el ” Ministerio de Desarrollo Social no ha resuelto un problema elemental como el de los comedores populares que desbordan de demandas, ya no solo de desocupados”. Asimismo denuncia que el Gobierno alega que las empresas alimenticias no quieren vender los alimentos.
“Crece la pandemia y los contagios empiezan a avanzar por los barrios más humildes (.). El IFE, único subsidio que el Gobierno lanzó allá en el lejano 23 de marzo, ha dejado a más de 4 millones de trabajadores sin ingresos y una gran cantidad de beneficiarios lo cobrará recién en junio (.). Vamos a movilizarnos, defendiendo la cuarentena, por eso lo haremos respetando el distanciamiento social y con barbijos. Nos movilizamos en todo el país por estos reclamos elementales porque con hambre no hay cuarentena”, cierra el texto publicado.