Este martes, Brasil registro más de 1700 muertes coronavirus, el número de decesos más alto en un solo día durante toda la pandemia.
El país presidido por Jair Bolsonaro está batallando con una variante más contagiosa de Covid- 19, la cepa ya arrasó con Manaos, se extendió a otras ciudades y puso al sistema sanitario está al borde del colapso.
“La aceleración de la pandemia está llevado al colapso al sistema público y privado de salud en varios estados, y eso podría fácilmente repetirse en cada región de Brasil”, informó el Consejo Nacional de Secretarios de Salud en un comunicado, además los funcionarios advierten que “La anémica implementación de la vacuna y la lentitud con que llegan las dosis no permite augurar que ese escenario se revierta a corto plazo.”
Ya hay estudios preliminares que sugieren que la variante que arrasó con Manaos no sólo es más contagiosa, sino que parece capaz de infectar a quienes se han recuperado de otras versiones del virus.
El caso de Manaos
Manaos, capital del estado norteño de Amazonas, sufrió un brote severo de coronavirus en abril y mayo del 2020, por lo cual los científicos presumian que la ciudad entera podría haber alcanzado la inmunidad de rebaño.
Pero después, en septiembre, los casos en el estado empezaron a crecer, causando perplejidad en las autoridades sanitarias. Para enero, los científicos habían descubierto la nueva variante, ahora conocida como P.1., ya era preponderante en todo el territorio. Y en pocas semanas, el peligro que representaba se hizo evidente: los hospitales de Manaos se quedaron sin oxígeno en medio de una oleada de pacientes, y muchos murieron por falta de este suministro.
Nueva variante
Los científicos se desvelan por entender mejor las nuevas variantes y el modo en que se esparcen por el país. Pero la limitación de los recursos de testeo y rastreo no les permiten determinar el rol que están teniendo esas versiones del virus.
Anderson Brito, virólogo brasilero de la Universidad de Yale, dice que solamente en su laboratorio han secuenciado a casi la mitad de todos los genomas de coronavirus que pululan en Brasil. Mientras que Estados Unidos ha secuenciado el genoma de alrededor de 1 cada 200 casos confirmados, la secuenciación en Brasil es de 1 cada 3000 casos.
La variante se está propagando a toda velocidad. Para fines de febrero, los funcionarios de salud habían informado casos de la variante P.1 en 21 de 26 estados brasileños, pero sin más testeos es difícil evaluar su prevalencia.
Vacunación
Una forma de frenar el aumento sería a través de las vacunas, pero la inoculación en Brasil, como en tantos países, es lenta.
Brasil empezó a vacunar a grupos prioritarios, incluidos los profesionales de la salud y los ancianos, a fines de enero. Pero el gobierno no ha logrado asegurarse una cantidad suficiente de dosis.
Hasta el martes, y según datos del Ministerio de Salud de Brasil, un poco más de 5,8 millones de brasileños —aproximadamente el 2,6% de la población—, habían recibido al menos una dosis de la vacuna para el Covid-19. Solo alrededor de 1,5 millones habían recibido ambas dosis.
Margareth Dalcolmo, neumonóloga , afirmó “deberíamos vacunar a más de un millón de personas por día”, y no lo estamos haciendo, no porque no sepamos cómo, sino porque no alcanzan las vacunas.”
El ministro de Salud brasilero, Eduardo Pazuello, dijo que el gobierno espera vacunar aproximadamente a la mitad de su población para junio, y al resto para fin de año.
Pero muchos brasileños tienen poca fe en un gobierno dirigido por un presidente que ha saboteado la cuarentena, ha minimizado sostenidamente la amenaza del virus y promovido remedios no probados, incluso después de que los científicos hayan confirmado que eran inútiles o incluso peligrosos.