En el marco de una agenda de reuniones con referentes de la oposición, Cristina Kirchner recibió a dirigentes de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y de Somos Barrio de Pie para analizar la coyuntura económica y social y acordar una estrategia de trabajo conjunto.
La expresidenta apunta así a frenar el ajuste del gobierno del presidente Javier Milei y comenzar a delinear las alianzas de cara a las elecciones legislativas del próximo año.
Con el mismo objetivo,la expresidenta se reunió días atrás con dirigentes sindicales cercanos al kirchnerismo, referentes del ala dura de la Confederación General del Trabajo (CGT). Además, están previstas nuevas reuniones con distintos sectores con las cuales la ex jefa de Estado busca reconstruir su capital político.
En diálogo con TN, Norma Morales, dirigente de la UTEP y secretaria de Somos Barrios de Pie, que participó del encuentro, contó que en la reunión con Cristina Kirchner coincidieron en el análisis sobre la crisis social y económica y confirmó que acordaron trabajar para frenar las leyes de Milei en el Congreso.
Además, acordaron avanzar en un armado común para las elecciones. Según dijo Morales, “hubo autocrítica de parte de la política y de parte de las organizaciones sociales”.
“Hubo coincidencia y acordamos una mesa de trabajo en donde estemos todos, los sindicatos, la Iglesia, los organismos de derechos humanos, la política, porque los necesitamos a todos en este contexto. El hambre en nuestro país es nuestra preocupación, es lo que no nos deja dormir”, dijo Morales.
Los dirigentes también concordaron en la necesidad de frenar las iniciativas del Gobierno en el Congreso, como el veto al aumento de las jubilaciones. También trabajarán en una nueva ley de emergencia alimentaria, que vence a fin de año”.
La oposición dura empezó a contar los votos para conseguir los dos tercios en ambas Cámaras y ratificar la reforma jubilatoria que se aprobó en el Congreso y que fue rechazada por el presidente Javier Milei.
El reclamo a los referentes de la política “que no salieron a la calle”
La visita a Cristina Kirchner fue la primera de una serie de encuentros previstos por las organizaciones sociales, entre los que no descartan a la oposición aliada y dialoguista, como el PRO.
“Venimos articulando acciones en las calles para frenar el ajuste brutal de este gobierno y necesitamos que esté la política, por eso planificamos estas reuniones bilaterales. Queremos buscar a los referentes de la política que vemos que no han salido todavía en estos siete meses de la gestión de Milei”, remarcó Morales.
En este marco y con ese reclamo bajo el brazo, la idea de las organizaciones era reunirse con la expresidenta antes de la peregrinación por el Día de San Cayetano, pero por problemas de agenda debieron postergar la fecha.
“Esta primera reunión con Cristina fue bastante amigable, hubo muchos momentos de autocrítica y de acuerdos, pese a algunas diferencias que tengamos, porque nosotros empujamos para que el objetivo sea ver cómo frenamos el ajuste de este gobierno”, agregó la dirigente de UTEP.
Los movimientos sociales advierten una situación crítica en los barrios populares y reclaman unidad
Según explicó, la idea es “dejar de hablar de las disputas y ponerse a la altura de lo que necesita el país”. Para lograr sumar a los referentes de la política, las organizaciones sociales buscan compartir un análisis de la situación en los barrios populares.
“A Cristina le llevamos la preocupación de la situación tan triste y tan cruel que venimos atravesando en los barrios populares; de los jubilados, que son los primeros que están en la fila; de los espacios de cuidado comunitarios, en donde todavía seguimos brindando la comida; del avance del narcotráfico”, dijo Morales.
“El narco terminó siendo el dueño del barrio, porque son los que les dan la comida a los comedores. Son los únicos que están generando laburo para los pibes, pero no para ir a levantar las paredes de una escuela, lamentablemente. Son los que dan un préstamo para comprar comida”, advirtió.
“Por eso es necesario empezar a juntarnos y construir estrategias en común para frenar esta situación. Con Cristina terminamos coincidiendo, porque ella también tenía un termómetro, una radiografía de la situación en los barrios y coincidimos en que la salida es colectiva, para lograr nuevamente un gobierno nacional y popular”, afirmó.