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Cuando intentaba escapar de Tucumán: atrapan al acusado de herir brutalmente con un machete a un joven en Monteros

El principal sospechoso de atacar a machetazos a Marcelo Décima fue aprehendido durante la tarde del lunes en la terminal de Monteros.

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La víctima se encuentra en grave estado
Descacharreo

La víctima permanece internada en grave estado en el Hospital Padilla.

El violento ataque ocurrió en la madrugada del domingo 23 último, en calle España y Echeverría de la ciudad de Monteros.

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Según los investigadores, el acusado Franco Pérez de 27 años, habría intentado fugarse de la provincia cuando fue localizado por la policía.

Efectivos de la Comisaría de Monteros a cargo del Oficial Principal Alberto Acosta, realizaron un allanamiento en el domicilio del acusado y secuestraron la ropa utilizada, pero no encontraron el arma utilizada en el ataque.

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“Diagramamos un operativo en la zona de la terminal de ómnibus, donde aprehendimos al sospechoso”, explicó el Comisario Mayor Manuel Castaño, Jefe de la Regional Oeste. En el procedimiento en Monteros trabajaron personal de la Comisaría y Patrulla Motorizada, en conjunto con un equipo de Infantería Oeste. El acusado quedó a disposición de Unidad Fiscal interviniente, del Centro Judicial de Monteros.

El locutor Héctor Collante, en un posteo en Facebook, relató lo ocurrido en avenida España al 400, cerca del acceso principal a la ciudad:

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En Monteros, un grupo de hombres ataco a machetazos a un joven trabajador del limón, en las primeras horas del domingo

Todo comenzó con una acalorada discusión y la cizaña por parte de uno de los atacantes, Carlos Décima se vio en inferioridad numérica absoluta y se quiso retirar del lugar, pero de pronto lo agarrón del brazo, mientras uno de los agresores cobardemente busco un machete y le partió el cráneo, le desprendió cuero cabelludo y parte de una oreja, otros machetazos fueron directo al brazo. Su estado es critico y lucha por su vida, otra pelea desigual.

Casi tan desigual como las que le tocan desde pequeño en el día a día, la estigmatización por portación de cara, la demora de 1 hora por parte de la policía y otra mas por parte de la ambulancia, aun hay rastros de sangre en su recorrido desde donde fue atacado y separado por un vecino, hasta donde cayó y fue auxiliado. En la esquina de España al 400, Monteros, a 300 metros lineales de la comisaria.

Algo falla de vez en cuando en el sistema, algo falla en nosotros como sociedad, y cuando hay una policía que no tiene servicio eléctrico para tomar la denuncia, un agente de la brigada que esta pensando absolutamente mas en el asado que humea y que pronto servirá su compañero, que en tomar la denuncia y entregar una copia a la familia para que por lo menos una vez sienta que están cumpliendo su ideal de proteger y servir, ahi fallan ellos, los que esperamos sean el brazo ejecutor de la justicia.

Espere hasta mañana, tenga paciencia y demás, suenan a consejos ligeros cuando no sos familiar de un pibe que se desangró esperando y que mientras aconsejás desde el uniforme, pelea otra vez una de esas batallas de su día a día, en un mundo que muchos de nosotros, ni en pesadillas visitamos.

Empatía, bonita palabra, pero cuando alguien como “Carlitos” cae, y los pobres desamparados del todo son su única voz y defensa, uno se da cuenta que esto no esta nada bien, que hace mucho no esta NADA BIEN. Justicia por Carlos, que Dios le ayude a recuperarse pronto.

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