¨Hay una serie de factores que predisponen esta situación como el PH, la humedad, la mala limpieza, el dejar pasar muchas horas con el pañal sin cambiarlo, lo que produce la maceración de la piel, estimulando la alteración en la barrera cutánea inmadura¨, explicó la referente. E indicó que, como resultado de todo esto, el bebé puede sufrir una variación de la microbiota, es decir en las bacterias y gérmenes de la flora.
La jefa del servicio aseveró que existen dos tipos de dermatitis: La irritativa, que es la primera que aparece en el bebé en forma de eritemas en el área del pañal con una descamación simple y que se puede solucionar con un tratamiento que le realice la mamá indicado por un profesional. Por otra parte, existe una dermatitis más severa donde la piel se presenta más colorada con lesiones erosivas o sangrantes, situación que debe sí o sí ser tratada por un especialista.
En tanto, la dermatóloga indicó que los niños durante la lactancia tienen un tránsito acelerado, por lo que las heces pueden tener un PH menor y generar una mayor actividad de las enzimas. Esto predispone a una dermatitis irritativa del pañal.
Respecto a lo último, la especialista contó que antiguamente muchas madres les daban a sus bebés una pastilla en la mamadera para variar el PH de la orina, y aclaró que eso actualmente está totalmente contraindicado y no se utiliza de ninguna manera.
Por último, Molina brindó recomendaciones a la hora de higienizar a los niños que usan pañal: ¨Hacerlo con elementos no irritantes como toallitas formuladas específicamente para la cola del bebé u óleo calcáreo es lo ideal. No lavarlo permanentemente al bebé y evitar higienizarlos con agua y algodón. Ante la falta de elementos exclusivos, se puede hacer uso de un té de manzanilla frío¨.
Ministerio de Salud Pública Tucumán