Gabriel Yedlin se refirió esta mañana a trascendidos sobre el plan alimentario y, también hizo referencia al IFE y la inflación.
“Desde el Consejo Federal de Desarrollo Social y desde nuestra vinculación formal con el ministro de Desarrollo Social (Daniel Arroyo), no tenemos ninguna información concreta respecto de un nuevo Ingreso Familiar de Emergencia (IFE)”, aclaró el ministro de Desarrollo Social provincial, Gabriel Yedlin, en diálogo con LV12 ante los trascendidos que indicaron que el Gobierno nacional podría lanzar un nuevo IFE.
Además, opinó que “hay que ser muy cautos” con ese tipo de información y destacó el gran esfuerzo del Gobierno nacional en términos presupuestarios para ayudar a los grupos que más necesitan (grupos vulnerables, comercios, ayuda a empresas para pago de sueldos, ayudas en términos de Asignación Universal, Tarjeta Alimentar, entre otras líneas).
En términos de seguridad alimentaria, aseguró que “la Tarjeta Alimentar es la estrategia más importante del Gobierno nacional”. Explicó que es una política transitoria de transferencia de recursos a personas más humildes para que puedan comprar alimentos y destacó que permitió transitar esta época con paz social.
En la primera etapa de la Tarjeta (niños y niñas de hasta 6 años), a Tucumán llegaron 75 mil plásticos. En esta nueva fase, a partir de ampliar la edad hasta 14 años, se generó un volumen de más de 100 mil familias, lo que se traduce en 830 millones de pesos que llegan a las personas para compra de alimentos.
Pero para que se esa plata rinda, los alimentos y productos afines deben ser accesibles. Por eso, Yedlin pidió que “la gente que produce, distribuye y vende alimentos lo vea como una oportunidad de trabajo más que como solo una oportunidad de negocios” y recordó que “la idea es que la gente en sus barrios pueda comprar a precios accesibles”.
En ese sentido, descartó los rumores respecto de una posible quita del IVA de alimentos adquiridos con la Tarjeta Alimentar.
Inflación
“El tema de la inflación es complejo y es el problema más difícil que estamos teniendo. No nos va a alcanzar darle dinero a la gente más humilde para comprar alimentos si todo el tiempo son más caros”, admitió el Ministro.
Luego explicó que “cuando el INDEC mide pobreza lo hace en relación al ingreso, en una familia tipo, en relación a una canasta de alimentos (los llamados secos)”. Las cifras son alarmantes y algunos alimentos inalcanzables si recordamos que el año pasado la inflación fue alrededor de 40%, la canasta básica subió 45% y la carne 70%, algo similar a lo que está sucediendo este año.
“Los argentinos ganamos en pesos y los alimentos tienen que tener valor en peso. El mundo compra lo que Argentina exporta a valor dólar. Pero quienes producen y venden esos alimentos tienen que tener alguna racionalidad y pensar que no pueden maximizar las ganancias a costa de la mesa de los argentinos”, sentenció el funcionario.
