En el marco de las tareas de monitoreo permanente de la situación epidemiológica en establecimientos educativos provinciales, el ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer; mantuvo una reunión con la ministra de Salud Pública, Rossana Chahla; el secretario Ejecutivo Médico del Siprosa, Luis Medina Ruiz y el director de Epidemiología, Rogelio Calli; para analizar las medidas implementadas en torno al regreso a clases desde una presencialidad cuidada.
Bajo esta premisa se separa a estudiantes y docentes en burbujas pedagógicas, se realiza un estricto control de sanitario previo al ingreso a las aulas y se llevan adelante tareas de desinfección permanente de ambientes.
Desde las carteras de Educación y Salud destacaron que, desde el inicio de clases, se aislaron 1367 burbujas, de las cuales 1072 recuperaron la presencialidad y 295 se encuentran preventivamente aisladas en la actualidad.
Lichtmajer destacó la tarea del Sistema Provincial de Salud en la vacunación docente: “Ya se acerca el 35% del padrón de docentes que están recibiendo la segunda dosis, y podremos seguir avanzando en la etapa subsiguiente”; y agregó “quiero destacar el trabajo del Siprosa en la capacitación de vigías que tenemos en cada escuela, hay 2 mil vigías que hacen que tengamos un sistema de monitoreo, prevención y trabajo sobre las situaciones que se producen en tiempo real y nos permite continuar con este seguimiento”.
Medina Ruiz, en tanto hizo referencia al funcionamiento de las burbujas: “Hasta ahora en las escuelas no se han generado focos de contagio por lo tanto no es la escuela lo que nosotros tenemos que restringir en este momento. Sabemos que la estrategia de dividir en burbujas dio resultado porque se actuó de forma preventiva y permitió que no se generaran focos dentro de las escuelas. Sabemos que todo lo que rodea a la presencialidad (movimiento de padres y alumnos, uso de transporte público) pueden generar un aumento de casos pero si los protocolos se cumplen eso se mitiga”